Belén Pérez, concejala de Control del Padrón en el Ayuntamiento de Lorca, ha informado esta mañana de las actuaciones llevadas a cabo por la UCP –Unidad de Control de Empadronamiento– en el municipio de Lorca durante este mes de septiembre.
Esta unidad, cuyo objetivo principal es el de detectar y combatir irregularidades cometidas por los ciudadanos en relación a sus obligaciones con respecto al Padrón Municipal, está conformada por representantes de Urbanismo, Policía Local, Secretaría general y Estadística. Según los informes emitidos por la entidad, hasta el día de hoy durante este mes se han llevado a cabo un total de 37 inspecciones en inmuebles, con sus correspondientes expedientes de comprobación de empadronamientos y de información previa por tratarse de domicilios con 8 o más personas empadronadas, siendo siete de ellas las inspecciones realizadas en viviendas que presentaban sospechas de anomalías en el Padrón Municipal.
Del mismo modo, hasta la fecha, los procesos puestos en marcha por la Unidad han generado la apertura de 9 expedientes de baja de oficio, es decir, el reconocimiento por parte de los órganos competentes de la irregularidad llevada a cabo.
Según la edil, las irregularidades detectadas más comunes son: viviendas sospechosas por obras y cambios de uso realizados; personas que están residiendo en un domicilio en el que no se encuentran empadronadas; y, por último, personas empadronadas pero que no residen en esa casa, para cuya regularización se citará al titular del contrato para que comparezca. "En cualquier caso, el titular de la vivienda deberá adecuar los contratos a la realidad”, ha indicado Pérez, que también ha querido agradecer la colaboración ciudadana, "que ha supuesto el 20% de los avisos recogidos por la UCP", animando a los vecinos tanto de la ciudad como de las pedanías a que sigan colaborando con el consisitorio "en su lucha contra la infravivienda y la inclusión de aquellos que viven en esas circunstancias" así como "en las actuaciones iniciadas para desmontar el modelo de ciudad dormitorio que se ha extendido por algunas zonas de Lorca"
Asimismo, la concejala ha recordado que la reincidencia en este tipo de infracciones puede llegar a suponer sanciones económicas de entre 750 y 3.000 euros.
Sanciones leves, graves y muy graves
Se considera Infracción leve la instrucción de “dos” expedientes de baja, a una misma persona, por inscripción indebida por falta de veracidad en la acreditación de la vecindad en el domicilio; la cometida por el propietario o titular del contrato de arrendamiento que falten a la verdad en su declaración sobre el domicilio de otra persona. Las infracciones graves, por su parte, conllevan la instrucción de “tres” expedientes y las infracciones muy graves se impondrán a los que tramiten más de “cuatro” expedientes de baja, se inscriban indebidamente o haya falsedad documental del propietario y los moradores.