Ordenanza

Los salones de juego pasan a tener consideración de pubs y bares con música en Lorca

Entra en vigor la Ordenanza de Ruido que incorpora a los vecinos a la Mesa contra la Contaminación Acústica

José Luis Ruiz y Diego José Mateos, este viernes. | PILAR WALS

José Luis Ruiz y Diego José Mateos, este viernes. | PILAR WALS / p.wals

La nueva Ordenanza de Ruido, que entra en vigor, compatibilizará el impulso al ocio y la convivencia ciudadana. La normativa define los grados de insonorización de los locales, establece un control de las emisiones de ruidos y adecúa las exigencias de mínimos en anchos de calles y superficies para el comercio y la hostelería.

«Hoy entra en vigor la nueva Ordenanza de Ruido Municipal que permitirá compatibilizar el impulso del ocio con el descanso de nuestros vecinos, ya que esta regulación ha sido elaborada desde el Ayuntamiento con la colaboración de las entidades locales y los representantes vecinales», afirmaba el alcalde en funciones, Diego José Mateos.

Anunciaba la puesta en marcha de la ordenanza junto al concejal de Medio Ambiente en funciones, José Luis Ruiz. Ambos señalaban que se trata de una ordenanza que se ha elaborado «conscientes de la necesidad de establecer medidas que permitan la celebración de actividades de ocio en la ciudad, pero, a su vez, garantizando el respeto al descanso y la convivencia ciudadana y a todos aquellos lorquinos que residan en zonas cercanas a establecimientos hosteleros».

«Los salones de juego pasan a tener la consideración, a efectos de control de ruidos, de pubs y bares con música y los vecinos serán parte del seguimiento de la Ordenanza quedando incorporados en la Mesa contra la Contaminación Acústica», apuntaba Mateos.

Se permitirá la instalación de televisión e hilo musical en todos los bares y actividades que dispongan o tramiten licencias con música. Los establecimientos más ruidosos tendrán que disponer de aparatos de control de ruidos, con un seguimiento por parte del Ayuntamiento, y el resto tendrán limitadores sonoros en el propio establecimiento.

Además, se modifican las condiciones de anchos de calles y superficies mínimas para abrir un local pasando de 7 a 5 metros cuadrados y de 100 a 55 metros cuadrados.