Fiestas

Universo y Terremoto, reyes de los Caballos del Vino en Caravaca

Se trata de la tercera ocasión en la que la peña Universo se alza con el primer puesto de enjaezamiento

Enrique Soler

Enrique Soler

La yegua 'Retama', de la peña caballista Terremoto, entra en el olimpo de la carrera de los Caballos del Vino, tras proclamarse campeona de este 2023, realizando un tiempo de 8,115. La peña corrió en el puesto número 32, y los caballistas tuvieron que sufrir hasta el último minuto y esperar la carrera de la Peña Triunfador, que tuvo que repetirla tras caerse el transponder que se usa para cronometrar el tiempo que invierten los caballos en realizar los 80 metros que separan el monumento con el inicio de la puerta que da acceso a la lonja de la Basílica de la Vera Cruz. Tristemente la Peña Triunfador realizó carrera no válida, tras caerse dos de sus componentes.

El segundo puesto fue para la peña Artesano (8,282), mientras que la tercera posición fue para la peña Bavieka (8,285). La carrera estuvo parada durante unos 20 minutos, ya que los servicios sanitarios tuvieron que atender a una mujer que sufrió un infarto en la explanada de la Basílica.

El primer premio de enjaezamiento de este 2023 se hizo esperar, los caballistas tuvieron que aguantar los nervios hasta casi las ocho de la tarde para conocer que la peña Universo se alzaba con el primer puesto del concurso de enjaezamiento. Es la tercera vez que esta joven peña llega al olimpo de los caballos del vino en la mañana del dos de mayo. Una peña que siempre trabaja por firmar los mejores puestos en enjaezamiento y carrera.

El diseño es obra del diseñador Juan Miguel López-Sánchez. Este año sacó un manto innovador que gustó tanto en la exposición como puesto sobre el caballo en la mañana de este 2 de mayo. El segundo puesto fue para la peña Al-Bino, mientras que el tercer puesto fue para la peña Terry.

Este año descienden al segundo bloque las peñas Espartaco y Mel-azules, mientras que ascienden al primer bloque Solterón-Triana y Zuagir. También descienden al tercer bloque Gaditano y Calimocho, mientras que ascienden al segundo Gacel y Terremoto. Por último, el año que viene estarán en el tercer bloque La Pastora y Panterry, mientras que descienden al cuarto bloque Centauro y Cortijero.

Tras dos años sin poder celebrarse el festejo, debido a la pandemia sanitaria, el año pasado la lluvia emborronó las Fiestas en honor a la Vera Cruz, los caballistas y los miles de asistentes volvieron a llenar las calles de Caravaca de alegría y color.

A las cuatro de la madrugada, comenzaba el ritual de convertir al equipo, que en la tarde del uno de mayo es mostrado con su belleza natural, en todo un Caballo del Vino. Los caballistas se esmeraban en que todo estuviera preparado, sin dejar nada al azar. El momento de vestir a un caballo se realiza de manera más íntima y donde participan un número limitado de componentes. Una vez que el caballo esta enjaezado la peña lo espera con júbilo para recorrer las principales calles de Caravaca, hasta que al mediodía una marabunta humana se desplaza hasta la Basílica, donde concluye el festejo con la entrega de premios.

Un cortejo que estuvo encabezado por la Amazona Mayor del Bando, Rosalía Dólera. También acompañaron al festejo de los caballos del vino, los bandos Cristiano y Moro, encabezados por sus Reyes Cristianos y Sultanes.

«Cada uno de los pétalos de esta bandeja representan el corazón de todos y cada uno de los caravaqueños»

A primera hora de la mañana, las autoridades se dirigan hasta el convento de las madres Claras para recoger la Bandeja de Flores. El hermano mayor de la Cofradía, Luis Melgarejo, la portó hasta el baldaquino que corona la Glorieta caravaqueña, donde tuvo lugar la Misa de Aparición. Una bandeja que este año se realizó con tres tipos de rosa ramificada en tonalidades rojas, hypericum, flor de arroz, cymbidium mini, nardos y astibe.

Las autoridades abrieron el corte hasta la Basílica y en la primera cuesta, el Hermano Mayor entregaba la bandeja al alcalde de la ciudad, fundiéndose en un afectuoso abrazo. En la cuesta fue una verdadera fiesta el paso de la bandeja entre aplausos y vítores. Posteriormente, el alcalde la puso a los pies de la Vera Cruz. Una bandeja donde van todas las peticiones de los caravaqueños a la Vera Cruz.

En primer lugar, el alcalde José Francisco García, muy emocionado, dijo: «Santísima Cruz dame fuerza y humildad para dirigirme a ti esta mañana, cada uno de los pétalos de esta bandeja representan el corazón de todos y cada uno de los caravaqueños».

El alcalde se dirigió a los ancianos e impedidos manifestando sobre ellos: «Son quienes nos han dejado este precioso legado, que ponemos hoy de manifiesto en toda Caravaca, una explosión de júbilo y alegría». Por último, el regidor pidió por todos los vecinos para que Caravaca «siga siendo una ciudad prospera». El acto finalizó con la bendición de las flores y el vino que subió el Caballo Histórico.

Durante la jornada visitaron la Ciudad Santa del Noroeste murciano el presidente de la Región, Fernando López Miras y la delegada del Gobierno en la Región, Caridad Rives. Ambos pusieron de manifiesto el «calado histórico que suponen para la Región las Fiestas de Caravaca». También estuvieron los candidatos a la presidencia de la Región del PSOE y Vox, José Vélez y José Ángel Antelo, respectivamente.

Por la tarde, sonaron timbales para anunciar el primer simulacro entre el Bando Cristiano y Moro, así comenzó la procesión que trasladó a la patrona hasta la Iglesia de El Salvador, donde pasará su primera noche en la ciudad.