Política

Nace en Altorreal un partido político para defender los intereses de las urbanizaciones

Buscan que los impuestos que pagan los residentes sean justos e igualitarios y que se reflejen en inversiones y servicios

Cartel de la nueva organización URBAC

Cartel de la nueva organización URBAC / L.O.

La Opinión

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Los vecinos de las urbanizaciones y pedanías de Molina de Segura han decidido agruparse en un partido político que busca defender los intereses de las urbanizaciones de la localidad. El nombre del partido es URBAC - Agrupaciones Activas.

Los objetivos del partido se podrían resumir, esencialmente, en dos puntos: que los impuestos que pagan los residentes en las urbanizaciones y pedanías sean justos e igualitarios y que la carga fiscal se refleje en inversiones y unos servicios de mejor calidad; y que se alcance un modelo de gobierno que represente la realidad de un municipio en el que las urbanizaciones y pedanías conforman una gran parte de la sociedad, tanto desde el punto de vista económico como social y cultural, por lo que deben ser atendidas en sus necesidades por igual.

Y es que desde URBAC consideran que el sistema de gestión de las urbanizaciones y las pedanías ha sido «ineficaz y lesivo para los intereses de los vecinos que las habitamos». Consideran, asimismo, que es «injusto estar financiando a otros barrios cuando nuestros entornos y servicios públicos se se deterioran», por lo que comparten, dicen, «la frustración de saber que da igual el resultado en las siguientes elecciones, nadie que no seamos nosotros equilibrará la balanza de impuestos frente a inversiones y servicios».

Aunque el perfil de quienes viven en los entornos que el partido pretende defender es variado, URBAC considera que «tenemos rasgos comunes que nos definen: somos trabajadores, nos gusta la tranquilidad, respetamos a nuestros vecinos y no generamos problemas; en definitiva, construimos comunidades poco conflictivas». No obstante, añaden, «este carácter es percibido errónea o interesadamente como indolente y manipulable».

«Ahora, de nuevo elecciones, veremos cómo nos ofrecen limosna en forma de parches y obras menores. Cuando la realidad es que están convirtiendo a las urbanizaciones en distritos decadentes donde el valor de nuestro patrimonio no sólo se estanca, sino que se deprecia», por lo que «la única solución es que los vecinos nos agrupemos para condicionar el presupuesto municipal», concluyen.