Hostelería

El cultivo de la alcachofa ha caído en los últimos años un 20 por ciento en Lorca

Una campaña pretende poner en valor este producto y devolverle su protagonismo en la mesa

Juan Marín, Diego José Mateos y Francisco Morales, probaban algunas de las tapas en las que la alcachofa era la protagonista.

Juan Marín, Diego José Mateos y Francisco Morales, probaban algunas de las tapas en las que la alcachofa era la protagonista. / Pilar Wals

La alcachofa era el principal cultivo del Valle del Guadalentín, siendo la variedad Tudela la única presente hasta hace poco más de una década. Desde entonces, se han diversificado no solo sus variedades, sino también los cultivos de otras especies en los campos de la comarca, cobrando especial protagonismo el brócoli y la coliflor y la unión de ambos, romanescu.

En la última década los cultivos de alcachofa han caído un 20 por ciento en el Valle del Guadalentín, una situación que se pretende revertir con campañas de promoción del producto. Los agricultores han detectado, afirmaba el director general de Cricket, Juan Marín, que muchos consumidores no la incluyen en su dieta al desconocer la forma de prepararla. “Ni siquiera saben cómo limpiarla y mucho menos cocinarla”. Y destacaba que el Guadalentín es junto a Navarra –limitada por la climatología- y Venta de Zafarraya, en Granada, donde actualmente se destinan más hectáreas a este cultivo en nuestro país.

Este martes se presentaban unas jornadas gastronómicas que pretenden poner en valor la alcachofa, pero también dar a conocer las distintas formas de cocinarla. Entre las nuevas variedades híbridas aportaban la Green Globe que se destina en un 80 por ciento a la exportación. Mercados europeos se han interesado por este nuevo producto que llega a la mesa para compartir recetas junto a delicatesen como el foie.

En las jornadas gastronómicas de la alcachofa participarán una treintena de establecimientos de hostelería del municipio. El presidente de los hosteleros, Jesús Abellaneda, recordaba que este producto “lo introdujeron los árabes” y que está muy presente en la “cocina sefardí”.

4.000 hectáreas de alcachofa

Unas 4.000 hectáreas del Valle del Guadalentín están dedicadas a este cultivo. Cada hectárea produce al año entre 15 y 20 toneladas de alcachofas, según afirmaba el director general de Campo de Lorca y Cricket, Juan Marín, que reseñaba que en los últimos diez años se ha reducido un 20 por ciento el terreno destinado a este cultivo. La principal variedad era la alcachofa de Tudela a la que le han salido una importante competidora, la Green Globe, que se exporta en un 80 por ciento. P.W. R. 

La alcachofa, recordaba Marín, es un “producto kilómetro cero” que ya cultivaban “nuestros bisabuelos y que llamaban ‘alcanciles’. Es un producto de toda la vida que vino a sustituir al algodón o el pimiento de bola y del que hay que hacer bandera”. Y hablaba del proyecto que se inició hace seis años para darlo a conocer de una forma natural, lo que ha llevado a que “esté presente en 4.000 restaurantes de Madrid”.

El vicealcalde y concejal de Economía, Francisco Morales, aportaba que las jornadas gastronómicas están poniendo en valor productos muy cercanos y que este tipo de acontecimientos no solo contribuyen a fomentar los establecimiento de hostelería, sino también muestran distintas formas de cocinar productos tan emblemáticos como la alcachofa.

De la alcachofa señalaba el alcalde, Diego José Mateos, que “durante mucho tiempo ha sido motor y sustento para muchos agricultores”. Y mostraba la sorpresa por el tamaño que presenta este producto en las plantaciones de Tercia. “Llegan a ser casi como melones”. Se trata de una nueva variedad en forma de flor y de gran tamaño que causa sensación en el centro de Europa, le indicaban. Por último, animaba a los hosteleros a “sacarle rendimiento a este producto”, mientras daba cuenta de algunas de las propuestas que se podrán encontrar en los establecimientos de la ciudad durante las jornadas.