Un ganadero del ‘asalto’ al Pleno de Lorca declara que "no sabía a lo que iba"

En el Juzgado de Instrucción número 7 de Lorca se retomaban este martes las declaraciones de los ganaderos presuntamente implicados en el ‘asalto’ al Pleno hace casi un año. Lo hacía un joven de una explotación de porcino que manifestaba ante la juez Cristina Ojados cómo vivió aquella jornada del 31 de enero del pasado año.

En su declaración que se iniciaba poco después del mediodía en los juzgados de la calle Padre Morote aseguraba tajante que no conocía realmente a lo que iba aquella mañana al Centro de Desarrollo Local, CDL, donde en esos días se llevaban a cabo las sesiones de los Plenos municipales por la situación de pandemia en que nos encontrábamos.

El joven, P. D. S. M., en su calidad de investigado, prestaba declaración y al ser preguntado por su presencia en el lugar aquella mañana señalaba que lo hizo por la preocupación sobre la situación que podía atravesar el sector. Reconocía que no fue uno de los primeros en entrar en el edificio que fue ‘tomado’ por los ganaderos, sino que lo hizo mucho después.

Ante la juez también comparecían dos de los agentes del Cuerpo Nacional de Policía que aquel día se encontraban en el Centro de Desarrollo Local. Uno de ellos, el instructor del atestado. Ambos ratificaban la declaración que ya realizaron. Entre las manifestaciones más relevantes que se producían este martes está que uno de los agentes aseguraba que entendía que el ‘asalto’ de los ganaderos no estaba preparado y que parecía "espontáneo".

Insistía en que los manifestantes no parecían haber preparado con antelación su participación en lo sucedido. Se movieron como si no tuvieran un plan preconcebido. No vestían dispuestos para pasar desapercibidos, todo lo contrario, declaraba ante la juez el agente del Cuerpo Nacional de Policía. El investigado asentía a las palabras del agente aportando que en no sabía a lo que iba, ni lo que tenía que hacer, sino que se vieron desbordados por las circunstancias del momento.

El ‘asalto’ al Centro de Desarrollo Local donde estaba previsto que se celebrara el Pleno municipal en el que se iba a debatir sobre las distancias mínimas de viviendas, colegios, consultorios médicos y manantiales de los cebaderos, estaba previsto que tuviera lugar hace casi un año. La sesión fue suspendida al adentrarse en el edificio decenas de manifestantes. Algunos de ellos, lograron llegar a la cuarta planta donde se llevaba a cabo una reunión entre dirigentes del sector, el alcalde y los portavoces municipales.