El grupo que conforma el Colegio Cardenalicio que escolta al Santo Patrón incorporaba este jueves dos capas bordadas en sedas y canutillo de plata sobre terciopelo carmesí. Junto a la del canciller vicepresidente primero de la Federación conforman en un número definitivo de 23 el grupo de escolta de San Clemente.
Las capas presentan, explicaba el Hermano Mayor de la Real Orden Hermandad de San Clemente, Francisco Parra, sobre el hombro izquierdo el “escudo de la Real Orden Hermandad que alberga en su interior las armas de Clemente I en sedas enmarcadas en tracerías góticas de plata sobre tisú de oro, cerrando el conjunto con la primera corona del Reino”. Y destacaba que los bordados los realizaba la bordadora Silvia Teruel.
Como signo distintivo de la representación que ostentan el Hermano Mayor y la Camarera del Santo Patrón, las capas se rematan con sendas borduras de granadas en plata en clara alusión al carácter fronterizo de Lorca, tal y como marcara el diseño de la capa del presidente como Gran Maestre de la Real Orden Hermandad.
20 hachotes o varas de mando representarán la autoridad en manos de los hermanos protectores de la imagen de San Clemente. Las varas se conforman “por un alma de madera de cedro teñido con remates de metal bañados de plata cincelado con arquerías góticas y nudos octogonales que guarda filiación con los que presenta la Cruz de Cristal de Roca que abre el cortejo”, detallaba Francisco Parra. Rematan las varas el escudo de la Real Orden Hermandad que alberga en su interior las armas de Clemente I enmarcadas en tracerías góticas cerrando el conjunto con la primera corona del Reino.
El conjunto se completa con una cuja del Guion pontificio realizada en terciopelo carmesí. Está bordada en canutillo de oro con un diseño de estilo gótico rematado en lanzas flamígeras. En el anverso, presenta el monograma de Clemente I y en el reverso un sol radiante símbolo de la Ciudad. La cuja ha sido donada y bordada por la secretaria-gonfaloniera de la Real Orden Hermandad, María del Carmen García Sánchez.
La edil de Cultura, María Ángeles Mazuecos, resaltaba la importancia de las nuevas piezas que se estrenarán este año. “El cortejo de escolta del Patrón, San Clemente, se completa con piezas bordadas en oro, plata y sedas, con lo que se logra un realce a las celebraciones que se han convertido en foco de atracción no solo para los lorquinos, sino también para los cada vez más numerosos visitantes que acuden a las celebraciones”.
