La Ley de Protección, Derechos y Bienestar de los Animales que se tramitaba estos días en el Congreso de los Diputados “prohíbe el uso de animales en exposiciones de belenes, cabalgatas o procesiones, en las que se mantenga al animal de forma antinatural conforme a las características propias de su especie”, afirmaba este lunes el presidente de Partido Popular, Fulgencio Gil Jódar, lo que podría “poner en serio riesgo los Desfiles Bíblico Pasionales de nuestra Semana Santa”.

El portavoz del PP anunciaba junto a la diputada nacional, Isabel Borrego, y el senador Juan María Vázquez, la presentación de enmiendas para retirar ese fragmento del texto, a la vez que insistían en la necesidad de proteger estas tradiciones con la elaboración de un Catálogo de Fiestas Ecuestres Protegidas, que “las mantenga fuera de polémicas y cerrar un debate surgido de la ignorancia de quienes han buscado generar un problema donde no lo hay”, argumentaba Gil Jódar.

El Partido Popular exigirá en el Congreso de los Diputados y el Senado que “se suprima la prohibición de que los caballos participen en las procesiones de Semana Santa, tal y como ha quedado recogido en el texto definitivo de la Ley que ya ha sido tramitado en la Cámara Baja por parte del gobierno sanchista”, insistía.

La diputada nacional del PP apuntaba que “no estamos hablando como hace unos meses del borrador del texto, ni de un documento de trabajo, sino de la versión definitiva”. Y detallaba que en el Título IV, denominado ‘Empleo de animales en actividades culturales y festivas’, en el artículo 73 referido a Romerías, eventos feriados, belenes, cabalgatas y procesiones, el Apartado número 5 establece literalmente que “se prohíbe el uso de animales en exposiciones de belenes, cabalgatas o procesiones, en las que se mantenga al animal de forma antinatural conforme a las características propias de su especie”.

El PP exigía que se aclare específicamente qué se quiere decir con la “muy confusa descripción: ‘de forma antinatural conforme a las características propias de su especie’ y que podría llevar a interpretarse que un caballo enganchado a una cuadriga o montado en procesión se encuentra ‘de forma antinatural’, y aquí radica el problema que están generando a pesar de que se les ha advertido en repetidas ocasiones”, recalcaba Fulgencio Gil.

El senador Juan María Vázquez manifestaba que “se trata de la Ley de un ‘lobby’, ni la que necesita España ni la que merecen los sectores implicados. Se han presentado más de 6.000 alegaciones y no han atendido ninguna. No es, por tanto, fruto del consenso. Estamos ante una Ley que atenta contra la seguridad pública, ataca al mundo rural, genera inseguridad jurídica e invade competencias autonómicas”.

Los socialistas contestaban prácticamente de inmediato. Lo hacía el alcalde, Diego José Mateos, que era tajante al anuncio de los populares de que los Desfiles Bíblico Pasionales y la Semana Santa lorquina podría estar en riesgo. “Ya quisieran ellos. Es que parece que están en cuanto peor, mejor. No solo no está en riesgo, sino que, en cuanto a espectáculos, como es el caso de la Semana Santa, hay una Ley regional aprobada por el Partido Popular en los mismos términos que la Ley estatal o incluso más restrictivos. Y nadie ha puesto en duda la celebración de la Semana Santa de Lorca”.

Y añadía que “esto es rizar el rizo y buscar la preocupación e inquietud y politizar nuestra Semana Santa. Pido al Partido Popular que deje fuera de la política a nuestra Semana Santa. No puede empañar la Semana Santa de Lorca haciendo esas declaraciones y poniendo en duda su celebración”.

Se mostraba indignado por las manifestaciones de los populares y señalaba que “tenemos la mejor Semana Santa del mundo. Los lorquinos no se merecen una actitud política tan rastrera de poner en duda su celebración tal y como la conocemos. Nuestra Semana Santa es intocable, porque además, no se produce ningún maltrato a ningún animal. Al contrario se cuida al caballo como en ningún sitio”.

Por último, volvía a insistir que “si en Lorca podemos presumir de algo, a parte de nuestros bordados, es como se cuida y se mima a los caballos. Que dejen de sembrar dudas, que dejen de sembrar inquietud y que dejen a la Semana Santa de Lorca fuera de la lucha política”.