La Patrona de Lorca, Santa María la Real de las Huertas, presidía este jueves la Misa Mayor que celebraba el obispo de la Diócesis de Cartagena, monseñor José Manuel Lorca Planes. Le acompañaban el vicario episcopal, Francisco Fructuoso Andrés, y el párroco del Santuario Patronal, Miguel Ángel Olivares Alarcón, además de una amplia representación de curas no solo de Lorca, sino de distintos enclaves de la Región que abarrotaban el altar mayor del templo.

La Misa Mayor se iniciaba poco después de las once y media de la mañana. Antes, la Corporación Municipal en Pleno llegaba al Santuario Patronal bajo Mazas y portando el Pendón de la Ciudad en procesión desde donde cuenta la leyenda el entonces infante Alfonso, quien más tarde sería Alfonso X el Sabio, instaló su campamento real para preparar el asalto de la fortaleza.

Fernando López Miras, Diego José Mateos, Francisco Morales, Ignacio Arcas y Francisco Martínez Cosentino. Pilar Wals

El cortejo lo cerraba el vicealcalde, Francisco Morales, -que portaba el Pendón Real, una concesión a Lorca de Juan II de Castilla junto con el título de Ciudad Noble- y el alcalde, Diego José Mateos. Tras ellos, la procesión religiosa conformada por más de una docena de párrocos que cerraba el obispo de la Diócesis. José Manuel Lorca Planes agradecía durante su intervención la labor de la Hermandad de la Virgen de las Huertas, “por fomentar la devoción a la Virgen María junto al párroco Miguel Ángel Olivares Alarcón”.

El vicario episcopal de Lorca, Francisco Fructuoso Andrés; el obispo de la Diócesis de Cartagena, José Manuel Lorca Planes; y el párroco de la Virgen de las Huertas, Miguel Ángel Olivares Alarcón, en el altar mayor, acompañados por una docena de curas que participaron de la Misa Mayor. Pilar Wals

Y recordaba que estos días “tengo muy presente a Lorca por la inminente celebración del vigésimo quinto aniversario de la Coronación Canónica de la Santísima Virgen de la Amargura y de la Santísima Virgen de los Dolores”, titular del Paso Blanco y Paso Azul, respectivamente. La ceremonia estaba amenizada desde el coro alto del templo por Coros y Danzas Virgen de Lorca que entre sus cánticos incluyó temas en los que se aludía especialmente a la Patrona.

El Santuario Patronal registraba un lleno absoluto como se podía comprobar desde el coro alto del templo. Pilar Wals

Como manda la tradición al término de la celebración abandonaban el coro alto para situarse a los pies de la Patrona y dedicarle la ‘Jota Lorquina’. Pero antes, la Real Hermandad de Santa María la Real de las Huertas entregaba sus distinciones. El presidente de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, Fernando López Miras, recibía el título honorífico de Hermano Mayor de la Patrona de manos de la expresidenta de la Hermandad de la Virgen de las Huertas, Isabel Jiménez. López Miras, manifestaba su “especial ilusión” por asistir a la Misa Mayor. Y mostraba su agradecimiento por concederle uno de los “mayores privilegios y honores que un lorquino puede tener. Llevaré este reconocimiento con dignidad y con la alegría de saberme hijo de la Virgen de las Huertas e hijo de Lorca”.

La expresidenta de la Hermandad de la Virgen de las Huertas, Isabel Jiménez, entregaba al presidente de la Comunidad Autónoma, Fernando López Miras, el título honorífico de Hermano Mayor de la Patrona. Pilar Wals

Muy emocionado también se mostraba el empresario almeriense Francisco Martínez Cosentino, que recibía su distinción de manos del presidente de la Hermandad de la Virgen de las Huertas, Ignacio Arcas. Martínez Cosentino recordaba sus constantes visitas a Lorca y destacaba el esfuerzo de los lorquinos “que habéis sido capaces de levantar la ciudad tras los terremotos”. Recordaba que fue en Lorca donde su mujer dio a luz y se ofrecía para ayudar. “Aquí me tenéis para lo que necesitéis”.

Ignacio Arcas (c) entregó al presidente del Paso Blanco, Ramón Mateos, y la vicepresidenta primera del Coro de Damas de la Virgen de la Amargura, Pilar María Salinas Pelegrín, la Medalla de Oro de la Patrona a la Santísima Virgen de la Amargura. Pilar Wals

Con emoción la expresidenta de la Hermandad de la Virgen de las Huertas entregaba la Medalla de Oro de la Patrona a título póstumo al exministro José Guirao Cabrera. En nombre de la familia hablaba el alcalde, Diego José Mateos, quien recordaba que ‘Pepe’, como le llamaban cariñosamente sus amigos, “siempre hablaba de Lorca, de su juventud en esta ciudad, de sus estudios en el instituto de educación secundaria José Ibáñez Martín. Siempre estaba pendiente de la ciudad y mostró gran interés por la recuperación del patrimonio de Lorca, del santuario patronal”. Isabel Jiménez señalaba que la familia había pedido que el dinero previsto para el reconocimiento se destinara a sufragar alguna pieza para la Patrona. “Y así se ha hecho, por lo que Santa María la Real de las Huertas lucirá un nuevo bastón que recibimos hoy de su familia”, argumentaba mientras la hermana del exministro Ana Guirao entregaba el bastón.

La hermana del exministro José Guirao Cabrera, Ana, regalaba un bastón de mando a la Patrona que recogían el alcalde y la expresidenta de la Hermandad de la Virgen de las Huertas. Pilar Wals

Y la Santísima Virgen de la Amargura, titular del Paso Blanco, recibía la Medalla de Oro de la Patrona que recogían el presidente de la cofradía, Ramón Mateos, y la vicepresidenta primera del Coro de Damas de la Virgen de la Amargura, Pilar María Salinas Pelegrín. “Esta Medalla de Oro supone un gran orgullo, pero también la unión de dos devociones”, afirmaba Mateos, quien reconocía que llega en un momento muy importante para la cofradía. “Se produce en unos días en que celebramos el aniversario de la Coronación Canónica de la Virgen de la Amargura. Es el mejor reconocimiento y regalo que la ciudad podía hacerle a la Virgen de la Amargura”.

El empresario almeriense, Francisco Martínez Cosentino, recibía el título honorífico de Hermano Mayor de la Patrona de manos del presidente de la Hermandad Virgen de las Huertas, Ignacio Arcas. Pilar Wals

Y aprovechaba para invitar a todos a los actos conmemorativos que se iniciarán este lunes. Este día, el de la Virgen de las Huertas, contaba que le traían recuerdos de su niñez. “Las calles se llenaban de gentes que iban al convento de las Huertas a las misas. Era un día de gozo, de alboroto… Para mí, como para el resto de lorquinos, es una fecha señalada en el calendario y, a partir de ahora, lo será mucho más”. Antes de marcharse gritaba vivas a la Virgen de las Huertas, a la Patrona de Lorca.

Durante la celebración los asistentes no podían por menos que alzar la vista hasta lo más alto y contemplar muchas de las pinturas murales con pérdidas y chorreones, producto de las goteras. El templo está aún por concluirse de restaurar, aunque las obras podrían comenzar muy pronto, como anunciaba el alcalde. El volteo de campanas en señal de alegría en una fecha tan importante también se echaba en falta. Solo han tocado en alguna ocasión en los últimos años a golpe de badajo a cargo de voluntarios que se subían hasta lo más alto de la torre campanario para no perder la tradición. Quizás el año que viene la Misa Mayor pueda celebrarse en un templo ya restaurado.

Esta tarde está previsto que tras la Santa Misa el trono de la Virgen de las Huertas deje su Santuario Patronal para recorrer el barrio al que da nombre. La imagen será portada a hombros entre aromas de rosas y nardos.