Un centenar de vecinos de La Escucha se manifestaban este lunes a las puertas del Consultorio Médico de la pedanía en contra de su cierre. Se mostraban indignados “porque año tras año el cierre se amplia y ya no afecta únicamente a la época estival, sino que avanza hasta mediados de septiembre”, afirmaba en declaraciones a LA OPINIÓN el presidente de los vecinos de La Escucha, Sebastián Jódar.
Se quejaban de que la excusa es que la población desciende. “No es cierto. Aquí ocurre todo lo contrario, ya que muchos de los lorquinos que viven en la ciudad se trasladan a las pedanías en verano. Pero, además, regresan muchos de los que viven fuera y pasan sus vacaciones en sus casas de toda la vida. Y, a ello, hay que sumar los que acuden a las casas rurales”, destacaba Jódar.
Para muchos mayores de La Escucha el cierre durante tres meses supone graves inconvenientes. “Tienen que recurrir a familiares o vecinos para que los lleven al médico, ya que nos derivan al Centro de Salud de Purias, a diez kilómetros, y para asuntos más precisos al de Sutullena, aún más lejos”, argumentaba.
Están recogiendo firmas que harán llegar a la Consejería de Salud para reclamar que no se cierre el consultorio médico y que se amplíe el servicio. “Acabamos de iniciar la recogida y llevamos unas 400 firmas. Queremos así demostrar nuestro malestar por lo que nos están haciendo”, concluía Sebastián Jódar.
Junto a los vecinos estaba el concejal de Sanidad, José Ángel Ponce, que afirmaba que “los cierres no tienen explicación sanitaria, ni tampoco poblacional, ya que la mayoría de las pedanías de Lorca aumentan la población durante el verano”. El alcalde, Diego José Mateos, también se manifestaba señalando que “este cierre de centros periféricos provoca la saturación y el colapso de otros centros”. Y recordaba que zonas como Ramonete y Morata “perderán la atención pediátrica durante todo el verano, pese a que se trata de una zona de costa donde se prevé el aumento de población durante la época estival”.
