La Virgen del Alcázar dejaba anoche el altar de la capilla que preside en la antigua colegial de San Patricio para ocupar un lugar principal en el templo junto al altar mayor. Este sábado, a las 19 horas se celebrará una misa solemne en su honor, con la participación de la Cuadrilla de Auroros de Lorca y la intervención de la flauta barroca a cargo de Cecilia Aguilar con piezas renacentistas y barrocas de Diego Ortiz y Georg Philipp Telemann.

A su término, la imagen será portada a hombros en una procesión claustral por el interior de San Patricio, para concluir con el canto de la Salve en su capilla. La iniciativa, llevada a cabo por un grupo de fieles, pretende el rescate de las tradiciones, la investigación de la historia de Lorca y el cuidado del acervo del patrimonio de la ciudad.

Se recupera así, después de la pandemia, la celebración de la festividad de Santa María la Antigua del Alcázar, que al menos desde el año 1615 se celebraba el día 2 de mayo, fecha en el calendario antiguo de la Visitación de Nuestra Señora.

El grupo de fieles ha ido acometiendo en los últimos años mejoras en la imagen, como su restauración completa, la realización de ternos de camarín, el cuidado del ornato de la capilla, con la intención de ahondar en la historia de Lorca y rescatar del olvido a esta advocación que fue tan importante para la Ciudad.

Patrona desde 1615, contaba con Octava, procesión de primer rango con la asistencia del Cabildo Civil y Eclesiástico. La imagen primitiva, entronizada en la capilla del Sagrario, fue traída desde su iglesia en el Castillo, frente a la de San Clemente, según cuenta la tradición, custodiada allí por antiguos mozárabes, que el Cabildo rescató para engrandecer las aspiraciones del obispado Eliocrate