La primera Escuela de Cuidadores Familiares se pondrá en marcha en la ciudad como un proyecto piloto dentro de un programa de atención socioeducativa que pretende mejorar la calidad de vida de la persona cuidadora y la necesitada de cuidados. La propuesta la presentaban este jueves la concejala de Política del Mayor, María Dolores Chumilla; la técnico, Begoña Rada; y el gerente de la Fundación Poncemar, Luis Martínez.

Chumillas afirmaba que “desde este equipo de Gobierno somos plenamente conscientes de que las familias constituyen uno de los principales recursos en el entramado de atención a personas mayores, estos cuidados requieren de mucha fortaleza por parte de quienes la prestan pues una situación prolongada amenaza también la salud de los familiares que asumen esta responsabilidad y por ello que desde el Ayuntamiento, a través de la Concejalía de Política del Mayor, ponemos en marcha la primera Escuela de Cuidadores y Familiares”.

El proyecto se plantea como un servicio de asesoramiento e intervención psicoterapéutica y educativa para “aliviar la carga del cuidado y mejorar la calidad de vida de la persona cuidadora y la necesitada de cuidados, favoreciendo la permanencia de esta en su domicilio, en las mejores condiciones”, destacaba la edil.

Los objetivos de la Escuela son conseguir una mejor atención de las personas mayores dependientes a través de la formación en cuidados de los familiares y cuidadores, aumentando el grado de conocimiento del cuidador; favorecer el auto cuidado de los cuidadores familiares mejorando su autoestima; proporcionar los aspectos teóricos y habilidades prácticas de los cuidados básicos de las personas mayores dependientes; destacar la importancia del ‘cuidado del cuidador’ para garantizar una continuidad de cuidados a la persona mayor dependiente y mejorar la información de los recursos propios y externos de apoyo al cuidador, apuntaba Chumilla.

La primera Escuela se inicia con el desarrollo de seis sesiones grupales para personas cuidadoras sobrecargadas dirigidas por profesionales de psicología, educación social, enfermería, terapia ocupacional, trabajo social, derecho y fisioterapeuta. “Sesiones de diferente tipologías que se irán intercalando y donde se abordarán aspectos relacionados con la sobrecarga de la persona cuidadora, aspectos más relacionales, sesiones de carácter educativo sobre cómo abordar las diferentes problemáticas de las personas a quienes cuidan, sesiones antiestrés para fomentar el optimismo y empoderamiento y sesiones de acompañamiento para dar continuidad al programa”, detallaba la edil.

Habrá seis sesiones de dos horas y media a realizar una vez a la semana, destinada a la adquisición de conocimiento teórico práctico tanto para el cuidado del mayor dependiente como al propio autocuidado del cuidador y que culminará con una sesión corta de yoga terapéutico. Este taller piloto se impartirá todos los martes durante los meses de mayo y junio, en horario de 10 a 12.30 horas, en el Centro de Formación, Investigación y Asistencia en materia sociosanitaria de personas mayores en el Campus Universitario de Lorca del Centro de Día de la Fundación Poncemar.

Los contenidos iniciales, explicaba Chumilla, incluye el estudio de la figura del cuidador, cómo actuar con pacientes con algún tipo de demencia, el tratamiento ante patologías y síndromes geriátricos en el envejecimiento, primeros auxilios, yoga, higiene y mantenimiento de la piel en personas mayores, movilidad y transferencias según el grado de deterioro y caídas y técnicas de alimentación y administraciones de medicamentos.

Para participar en el programa es necesario inscripción previa, a formalizar antes del viernes, 29, bien acudiendo a la sede de la Concejalía del Mayor, situada en el Centro Cívico Francisco Méndez, o llamando a los teléfonos, 968 46 77 54 o 968 40 93 26.

La edil de Servicios Sociales insistía en que las familias constituyen uno de los principales recursos en el entramado de atención para las personas mayores, una situación prolongada de cuidado amenaza la salud física y mental del familiar o familiares que asumen esa responsabilidad, “por ello, desde el Ayuntamiento entendemos este proyecto como un sistema primordial para todas aquellas personas en las que recaen funciones de cuidado de personas mayores o enfermas con el objetivo de dotarlos de un recurso público con el que aprendan tanto a cuidar como a cuidarse”.