Restauran la Oración en el Huerto del Paso Blanco de Lorca

El grupo escultórico de la Oración en el Huerto, del Paso Blanco, compuesto por la imagen de Jesús y la del Ángel confortador, han sido restaurados por los maestros Antonio García Rico y Manuel Mateo Manzanera, de los talleres de restauración y madera de la Concejalía de Desarrollo Local.

Las imágenes son tallas en madera, policromadas y con decoraciones en oro estofado, creadas para procesionar en la Semana Santa lorquina dentro del desfile del Paso Blanco, sacadas a procesionar solo en 1950. Las obras son de tamaño natural. “Muestran volúmenes proporcionados y de elegantes formas, con una policromía muy lograda”, explicaba García Rico.

Las tallas fueron terminadas en 1949 por el escultor de origen valenciano Amadeo Ruiz Olmos (Benetússer, Valencia, 1913 – Madrid, 1993), afincado en Córdoba desde el año 1937. Un escultor distinguido con numerosos premios como el Nacional de Escultura, otorgado por la Real Academia de San Fernando (1945), Premio Bellver (1946), Premio Nacional de Escultura (1948) o la Primera medalla del salón de Otoño de Madrid (1948). Destacan sus esculturas monumentales, entre otras, el monumento a Maimónides en la Plaza de Tiberiades de Córdoba (1964) o el mausoleo de Manolete en el Cementerio de la Salud. “En el ámbito de la imaginería religiosa son muy celebradas sus imágenes en la Semana Santa de Córdoba, Úbeda, Baeza o las realizadas para la Diócesis de Guadix, entre otras ciudades y pueblos principalmente de Andalucía”, apuntaba García Rico.

El conjunto ha sufrido durante estos años múltiples avatares, lo que se traduce en un avanzado estado de degradación, “con pérdidas de volúmenes por fractura, abrasión o mutilación. Las policromías han recibido diversos repintes, con oxidación de los dorados de las estofas y desprendimientos de los aparejos de sustrato”, recalcaba.

Los daños más serios tenían su origen en las profundas grietas producidas por el desencolado de piezas, las distintas intervenciones inapropiadas en sus policromías, el inapropiado clavado y pegado de elementos desprendidos o fracturados. Y detallaba la mutilación de los pies de la imagen de Jesús, la pérdida de parte del ala derecha del Ángel y de parte de la talla del cabello de la misma imagen.

La edil de Fomento, Isabel Casalduero, explicaba que los trabajos han consistido en “consolidar y sellar las grietas y fendas, la reposición de volúmenes desaparecidos y la restauración en tareas de eliminación de suciedades, repintes y capas de barniz oxidado. Así como la reintegración de policromías y dorados diferenciados y la aplicación de un barnizado final de protección”.

También se dotaba, indicaba la edil de Fomento, de nuevas piezas para el columbario. “El ajuar de mobiliario de asiento y liturgia, se ha diseñado y realizado en madera maciza de pino Suecia, con asientos moldurados y patas ornamentadas con tallas y calados. Todo el conjunto se ha terminado con lacado al horno en tono nogal”.

El presidente del Paso Blanco, Ramón Mateos, agradecía el trabajo de la Escuela Taller y destacaba la importancia de la recuperación de las piezas que se situarán en el columbario. Junto a él, estaban el presidente de la Fundación Santo Domingo, Juan Jódar Bardón, y la presidenta del Coro de Damas de la Virgen de la Amargura, María del Carmen Gallego. 

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