La explotación ganadera de caprino, junto al campo de fútbol Alfonso Embarre del barrio de San Cristóbal, no será expropiada. El equipo de Gobierno no conseguía este lunes que se aprobara la propuesta que pretendía el inicio de expropiación de la instalación a cuyas puertas “se acumulan aguas fecales que producen persistentes malos olores y la proliferación de insectos como moscas, pulgas y mosquitos que afectan a la salud de los niños que practican deporte”, afirmaba el concejal de Urbanismo, José Luis Ruíz Guillén.

Partido Popular e Izquierda Unida-Verdes se unían para pedir que quedara sobre la mesa, algo que lograban con la abstención de Vox. Ambas formaciones, PP e IU-V, pedían que “se abra una negociación con los propietarios”. El edil de Urbanismo aseguraba que “una nueva unión de PP e IU-V ponen sus intereses políticos y personales por encima de nuestros niños, lo que es lamentable”.

El edil recordaba que unos 300 niños hacen uso del Campo de Fútbol Alfonso Embarre y “sufren graves problemas de falta de salubridad en el entorno de estas instalaciones deportivas situadas en el barrio de San Cristóbal, lo que ha sido denunciado en reiteradas ocasiones”.

El Pleno debía aprobar la expropiación de una explotación caprina situada frente al campo de fútbol. En concreto, dos parcelas con una superficie superior a los 1.700 metros cuadrados en las que se encuentran instaladas “naves de deficiente calidad y donde se acumulan aguas fecales que producen persistentes malos olores así como la proliferación de insectos como moscas, pulgas y mosquitos que afectan la salud de los niños que practican deporte allí”, explicaba Ruiz.

La unión de PP e IU-V bloqueaba la tramitación de un expediente de expropiación. Ese terreno, detallaba el edil de Urbanismo, pretendía servir para ampliar las instalaciones deportivas. El edil de IU-V se quejaba de que la cantidad que se le ofrecía al dueño “era insignificante. Con el dinero que se le pretende dar es imposible montar unas instalaciones como las que tiene en otro lugar”. El PP apuntaba que “no estamos en contra de que no se expropie, pero queremos que se llegue a un acuerdo con sus dueños. Que se inicie una negociación, porque la explotación caprina estaba mucho antes que el campo de fútbol”.