Un juzgado de lo Social de Murcia ha declarado procedente el despido de un trabajador que fue acordado por la empresa en la que prestaba sus servicios al descubrir que había trasladado a su correo privado datos reservados de la misma cuando disfrutaba de un permiso retribuido recuperable.

La sentencia señala que con su conducta "transgredió gravísimamente la buena fe contractual", y añade que también había grabado una conversación con el empresario, "lo que fue un signo claro de mala fe".

Recoge la resolución judicial que este trabajador de una empresa ubicada en el polígono industrial de Santomera fue despedido en febrero de 2020 por la causa apuntada, que la empresa consideró que era constitutiva de una falta muy grave, ya que tenía suscritas unas cláusulas de confidencialidad y secreto profesional.

Y añade que cuando se flexibilizó la normativa de lucha contra la covid-19 y se permitió el regreso al trabajo presencial, sus jefes le comunicaron que debía reincorporarse a su puesto, a lo que se opuso.

Fue entonces cuando la empresa le ofreció la opción de que se cogiera un permiso retribuido recuperable, que aquel aceptó, y fue entonces cuando se produjeron los hechos que condujeron a la extinción de la relación laboral.

El juzgado, al declarar procedente el despido, dice que en el juicio quedó probado que estando en aquella situación trasladó documentación reservada de la empresa a su correo personal.