La empresa lorquina AMG Servicios Integrados S.L., que forma parte de una Unión Temporal de Empresas (UTE) con otras dos asociadas -una de ellas con capital extranjero-, da de comer cada día a un millar de militares entre mandos y tropa en Líbano, donde el Ejército de Tierra español tiene desplazado un contingente en misión de paz y ayuda humanitaria en la base militar Miguel de Cervantes.

AMG Servicios Integrados S.L., con sede en la pedanía de La Hoya, baraja la posibilidad de seguir llevando a cabo este tipo de tareas en otros puntos del mundo, como «opciones de crecimiento». 

La empresa se encuentra instalada en Líbano desde hace aproximadamente un año, «después de un largo proceso de licitación y adjudicación, ya que la empresa que lo desempeñaba entró en un largo proceso judicial al no haber conseguido ser ellos los adjudicatarios», según señala a LA OPINIÓN el representante de la empresa lorquina, Agustín Abellaneda.

Entre tropa y mandos, según Abellaneda, dan de comer «cada día a un total aproximado de mil personas». La empresa, que ofrece también sus servicios tanto en colegios como en residencias y hospitales, mantiene que «no hay dos centros de trabajo iguales», ya que es este precisamente uno de sus lemas. «Hay que hacer el trabajo a medida del cliente y nadar al ritmo de los cambios que se nos presentan», consideran los responsables.

Los militares en Líbano, según Abellaneda, «comen de todo, pero, sobre todo, bien» y señala asimismo que «la gran mayoría de materia prima es española, lo que facilita mucho a los soldados poder permanecer hasta seis meses en un lugar tan alejado de España, algo que solo conocen las personas que, por desgracia, emigran fuera de nuestro país durante bastante tiempo».

La dieta mediterránea, según Abellaneda, «está siempre presente en las comidas y para ello hemos contratado los servicios de una licenciada en Nutrición». El clima y la situación en la que se encuentra el contingente, según el representante de AMG Servicios Integrados S.L., «siempre se tiene en cuenta a la hora de elaborar un menú, pero el clima donde se encuentra instalada la base española en Líbano es muy similar al que hay en la Región de Murcia».

Abellaneda reconoce también que «los militares no son más exigentes que cualquier otro cliente o colectivo», pero asegura que lo que siempre intentan es ser «exigentes con los estándares de calidad para intentar estar entre los primeros puestos».

En cuanto a los horarios de comidas -desayuno, comida o cena-, «también son muy similares a los nuestros», apostilla el representante de la empresa, que cuenta con alrededor de un centenar de trabajadores en Líbano, entre expatriados y locales. Los primeros son alrededor de una decena.

Las intenciones de la empresa, según su representante, «es crecer con paso firme». Al contrato firmado aún le quedan tres años de vigencia, que esperan cumplir de la misma forma que hasta ahora.

Las previsiones de la empresa lorquina pasan por seguir atenta a las bases futuras del Ejército español, con el fin de poder seguir realizando el mismo tipo de tareas. Según Abellaneda, «el contrato que tenemos no es solo para Líbano, sino para misiones de paz en el exterior que realice el Ejército».

Una empresa familiar de La Hoya volcada con su labor humanitaria

Los orígenes de la empresa AMG Servicios Integrados S.L. hay que buscarlos en el matrimonio de La Hoya formado por Francisco Abellaneda López y Antonia Moya García. Después de muchos años sirviendo hasta 8.000 comidas diarias en comedores escolares, residencias de personas mayores, guarderías, comedores universitarios, hospitales y hoteles, ha llegado a contar hasta con 500 empleados, tarea que en estos momentos continúan algunos de los seis hijos del matrimonio.

Antonia Moya García recibió un merecido homenaje por su larga y dilatada trayectoria profesional de parte de su familia, vecinos y amigos el pasado mes de septiembre en el centro cultural Alcalde José María Campoy de Lorca.