Un equipo de arqueólogos dirigido por el doctor en Arqueología y Prehistoria José Ángel Ocharan ha descubierto un santuario ibérico en una cueva de la Sierra de Balumba de Santomera. Entre las evidencias que han permitido concluir que se trata de un espacio cultural usado entre los siglos IV y III antes de Cristo se encuentran varias cerámicas de lujo, vasos empleados en los rituales, un cuenco realizado en plomo y un sello de bronce con una cruz gamada, entre otras cosas.

La ‘svastika’ plasmada en el sello es un símbolo solar ibérico (un ‘tetraskel levógiro’) y representa un objeto de culto. «Son representaciones solares, concebidas mucho antes de que los nazis se apropiaran lamentablemente de la ‘svastika’», ha precisado Ocharan, cuyo equipo está formado por integrantes de la Asociación Patrimonio Santomera y cuenta con la promoción del Ayuntamiento del municipio.

Los investigadores, que trabajan en la Sierra de Balumba desde 2019, mantuvieron en secreto los hallazgos porque había riesgo de expolio

«La ‘svastika’ viene del sánscrito y hay imágenes de ellas del milenio V antes de Cristo en la India», tal y como explica Ocharan, quien señala que se trata de un símbolo que era bastante usual en el mundo ibérico. Así, compara esta representación con los ‘trisqueles’ asturianos o los ‘lauburus vascos’. «Son lo mismo: representaciones solares y de la luz, todo lo contrario a lo que representaba el símbolo nazi», puntualiza.

El equipo de Ocharan está trabajando desde 2019 en el fortín ibérico del Balumba y la excavación ha sido impulsada con el respaldo y apoyo financiero del Ayuntamiento de Santomera, así como con el apoyo de la Asociación Patrimonio Santomera y sus voluntarios, que son los encargados de trabajar en el yacimiento.

Este hallazgo se ha producido en la tercera intervención del equipo. Anteriormente, habían encontrado una de las torres defensivas más grandes del mundo Íbero. En esta tercera intervención, los arqueólogos han mantenido los hallazgos en secreto porque había riesgo de expolio. Ocharan ha señalado que Balumba es un poblado ibérico cuyo origen se remonta hasta el siglo V a.C. pero que estuvo habitado, sobre todo, en el siglo III a.C. Su declive se produjo tras la segunda Guerra Púnica y la caída de Qart Hadasht (futura Cathagonova romana) en el 209 a.C.