La implantación de una gran superficie de una cadena de distribución de alimentación internacional en la ciudad es prácticamente una realidad. Así lo ha confirmado a preguntas de LA OPINIÓN este martes el alcalde, Diego José Mateos Molina, quien se ha mostrado sorprendido porque las negociaciones, que se vienen llevando a cabo desde hace meses, “se han desarrollado de forma muy discreta”, como él mismo ha reconocido. Se trata de una cadena de supermercados con más de 11.200 establecimientos en una treintena de países y que cuenta ya en el municipio con un supermercado. El lugar elegido para su implantación es el solar de la antigua subestación eléctrica de San Antonio que fue desmantelada hace años.
Las especiales características del lugar fueron tenidas en cuenta por el grupo internacional para elegir precisamente esa parcela. “Lorca es un lugar estratégico en estos momentos. La comunicación es excepcional con la comarca de los Vélez y de la Almanzora a través de la A-7. La construcción del paso subterráneo de San Antonio mejorará todavía más las comunicaciones suprimiendo las retenciones que se producían. Y a través de la RM-11 hay conexión directa con Águilas y Pulpí”, ha explicado Mateos.
La apertura de esta gran superficie supondrá un revulsivo para la ciudad. “No cabe dudas. Nos ayudará a recuperar la capitalidad comarcal, como también lo hará una serie de proyectos en los que trabajamos para recobrar la importancia que tuvimos como ciudad de compras”, ha añadido el alcalde. Se trabaja en el avance del proyecto cuyo estudio de detalle podría aprobarse el próximo septiembre. También deberá contar con un informe de la Confederación Hidrográfica del Segura. No hay fecha para la colocación de la primera piedra, aunque este tipo de establecimientos se construyen en tiempo récord, por lo que si todo va bien no es descartable que pudiera estar en funcionamiento en no mucho tiempo.
La zona de La Viña-San Antonio ha cobrado protagonismo en los últimos años por acoger varios establecimientos de alimentación de mediana superficie. A ellos, se suman hasta tres de comida rápida. El terremoto arrasó casi en su totalidad el barrio de La Viña que fue renovado casi en su integridad. Los viejos edificios sin aparcamiento y ascensor, fueron sustituidos por otros con la última tecnología, lo que ha llevado a muchos jóvenes a elegir el lugar como su residencia. Pero además, las comunicaciones entre La Viña y San Antonio mejorarán sustancialmente con la construcción del subterráneo, lo que permitirá un acceso cómodo al instituto de educación secundaria San Juan Bosco y al Complejo Deportivo de San Antonio.
La nueva gran superficie tendrá, por tanto, acceso casi directo a la A-7 lo que la pondrá a solo unos minutos de poblaciones como Puerto Lumbreras, Vélez Rubio, Vélez Blanco, María, Chirivel, Totana, Aledo, Álhama de Murcia y Mazarrón, pero también a un paso de ciudades como Vera, Garrucha, Pulpí y Albox.
Las gestiones del actual Gobierno municipal han sido primordiales para lograr desenquistar los problemas que desde hace años está sumido el solar que ocupaba la antigua subestación de San Antonio. En esa zona estaba previsto que se desarrollase un complejo de viviendas que la crisis económica y el terremoto paralizó. Ahora podrían retomarse esos viejos proyectos con el auge que se espera dentro del sector de la construcción, según ha admitido Mateos, quien ha destacado la “importancia” que supone para la ciudad la “implantación” de actividades económicas como la apertura de una nueva superficie. “Generan empleo y atraen público a la ciudad, lo que es fundamental para recuperar nuestra economía que se ha visto tan dañada durante la situación de pandemia en que nos vemos sumidos desde hace más de un año”, ha concluido.
