La crisis sanitaria ha impedido celebrar dos años seguidos las Fiestas de la Virgen del Carmen de Lo Pagán de la manera tradicional, teniendo que reinventarse para adaptarse a las restricciones. Pero lo cierto es que esta jornada suele ser muy distinta, reuniendo a miles de personas que festejan durante todo el día y hasta la madrugada del día 17. ¿Quieres saber cómo suele ser? 

Cada 16 de julio, comienza la celebración en San Pedro desde las siete de la mañana, con una diana a cargo de la Banda de Música por las calles del municipio, que finaliza en la Plaza de la Constitución, donde a las nueve de la mañana da comienzo la misa en su honor.

Desde hace varios años, la misa se realiza en el exterior del templo debido a la numerosa afluencia de público. Una vez finalizada la misma, la imagen inicia el recorrido que la llevará hasta el mar, acompañada de vecinos, visitantes, pescadores y fieles, todos ellos ataviados con camisa blanca y pañuelo azul al cuello.

En el recorrido de la procesión terrestre que lleva a la imagen de la Virgen hasta el mar, hace tres paradas en tres altares que se adornan con banderolas y flores en su honor y donde se entona la Salve Marinera. Ésta tienen su origen en una zarzuela del siglo XIX llamada El molinero de Subiza y de ella se sacaron los versos de la Salve Marinera.

En ella había una canción dedicada a la Estrella de los Cielos, que empezó a cantarse informalmente en diferentes barcos de la Armada, extendiéndose su canto por toda la Marina hasta que en 1942 se reglamentó esta Salve, convirtiéndose en ofrenda coral de los hombres del mar.

En 2017 se conmemoró en 125 aniversario de la Romería de la Virgen del Carmen, para ello, los artistas de la Compañía de Mario realizaron una obra mural que refleja la imagen de la Virgen, acompañada de los iconos más representativos de la localidad como los pescadores, las salinas o el Molino Quintín.

La AGA sobrevuela el mar durante la procesión marítima Ayto San Pedro

En la romeria maritima del 16 de julio, numerosas embarcaciones engalanadas con banderines esperan a la imagen de la Virgen del Carmen en el puerto de Lo Pagán. Cada año, es el último barco pesquero adquirido el que tendrá el honor de llevar a la Virgen en su recorrido por las aguas del Mar Menor, mientras que decenas de barcos de pescadores la acompañan.

Durante el transcurso de esta romería por el mar hay un momento muy emotivo, las embarcaciones paran los motores, se arrojan claveles a las aguas, en memoria de los hombres del mar fallecidos y se guarda un minuto de silencio.

Finalizada la romería marítima, se celebra una misa de campaña en la Explanada de la Lonja de Pescado y, a su término, se traslada la imagen de la Virgen en procesión hasta la iglesia Nuestra Señora del Carmen en Lo Pagán, donde permanecerá durante el día siendo visitada por multitud de fieles.

Tras los actos lúdicos, festivos y deportivos que se celebran durante toda la jornada en su honor, a media noche, junto a la Lonja de Pescado, se dispara un castillo de fuegos artificiales como despedida a la Virgen del Carmen, tras lo cual la imagen regresa en procesión a San Pedro del Pinatar.

Aproximadamente a las dos de la madrugada del 17 de julio, tiene lugar la solemne y festiva entrada de la imagen a la Iglesia de San Pedro Apóstol y como recibimiento se entona la Salve Marinera y se dispara una gran traca final que pone el punto final a la jornada festiva.

La Virgen del Carmen permanece hasta el 16 de julio del año siguiente en la Iglesia de San Pedro Apóstol, momento en que vuelve a recorrer las calles de San Pedro del Pinatar y Lo Pagán, rumbo a su procesión marítima por el Mar Menor. Una tradición sin final.