“Nadie olvida dónde estábamos aquel día y qué hacíamos en el preciso momento en que Miguel Ángel Blanco fue secuestrado y asesinado por la banda terrorista ETA”. Así recordaba anoche el vicealcalde y concejal de Turismo, Francisco Morales, lo sucedido hace veinticuatro años. La Alameda de la Constitución fue escenario de un homenaje al concejal del PP de Ermua. El vicealcalde dejó flores ante una fotografía del joven de 29 años acompañado por los portavoces municipales de PSOE, José Luis Ruiz Guillén; Partido Popular, Fulgencio Gil Jódar; y Vox, Carmen Menduiña.

Del espíritu de Ermua habló Morales que recordó que todo el país “se unió y levantó” en aquellos momentos de incertidumbre contra ETA. “Aquí estamos, un año más, para recordar a Miguel Ángel Blanco y a aquella tragedia que consiguió hacernos más fuertes y logró la concordia entre todos”. Antes, el Grupo Scout Ciudad del Sol leyó una ‘Carta abierta a los ciudadanos’, que tituló ‘Memoria de los justos’. Cuatro jóvenes scouts que “aún no habían nacido cuando ocurrió la tragedia”, dijo su coordinador, Pedro Enrique Llamas, relataron lo vivido aquel julio de 1997. “Millones de ciudadanos se movilizaron durante cuatro días para intentar salvar la vida de Miguel Ángel y para manifestar la indignación y la reprobación de un asesinato en cámara lenta”.

Ermua fue un ejemplo, “un referente moral de compromiso por la democracia y la libertad que la banda llevaba treinta años intentando aniquilar”, continuó otra joven scouts. Y añadió que aquellos días “nació un nuevo compromiso social en la lucha contra ETA y la mejor estrategia para derrotar a la banda que se basaba en la centralidad de las víctimas, la exigencia de la aplicación de la Ley, la unidad en torno a los principios constitucionales y el aislamiento de los terroristas y sus apoyos”. No olvidaron las cifras: “ETA ha asesinado a 853 ciudadanos, herido a 2.500, secuestrado y extorsionado a cientos y provocado el exilio de miles”.

Los jóvenes concluyeron asegurando que “nos rebelamos hoy contra el olvido y la impunidad”. Y rindiendo homenaje “a todas las víctimas del terrorismo, a sus familias, compañeros y amigos y a un inmenso colectivo anónimo de ciudadanos y servidores públicos: policías, guardias civiles, militares, jueces, fiscales, políticos, periodistas valientes, ciudadanos que se enfrentaron a ETA y resistieron la ofensiva para mantener la democracia, no callaron, arriesgaron su bienestar por defender a las víctimas y a los amenazados, muchas veces, sin suficientes apoyos. Vamos a seguir contando, en especial a los más jóvenes, lo que pasó, cómo pasó y por qué paso y para este compromiso con la ‘Memoria de los justos’, ciudadano, te necesitamos”.