El tejido empresarial no quedó impune ante el terremoto. La Cámara de Comercio y la Patronal Ceclor -Confederación Comarcal de Organizaciones Empresariales de Lorca- tuvieron una respuesta inmediata para lograr la reactivación en tiempo récord, necesaria para que la ciudad recuperara la normalidad. Las reivindicaciones históricas se pusieron sobre la mesa en un intento por paliar la difícil situación en que quedó el municipio. «Lo vimos como una necesidad imperiosa, porque la economía de toda la ciudad se había quedado gravemente afectada», afirmó el presidente de Ceclor, Antonio García Díaz. El soterramiento del ferrocarril a su paso por la ciudad se planteó como «prioritario», según García Díaz, a la vez que se pidió que se impulsara la construcción de las rondas de circunvalación, el recinto ferial y la remodelación de la avenida de Juan Carlos I. «Nuestra intervención en esta última obra fue destacada, porque conseguimos incorporar asuntos primordiales como la ampliación del ancho de acera», agregó el presidente de la Confederación Comarcal de Organizaciones Empresariales de Lorca.
El túnel de San Antonio, para mejorar el tráfico de toda la ciudad, o el soterramiento de la Alameda de Cervantes para salvar el paso a nivel de la Alameda de Cervantes, también fueron reivindicados por los empresarios. Aunque este último asunto, según García Díaz, no fue admitido «a la espera de la decisión final del soterramiento del ferrocarril a su paso por la trama urbana».
La autovía a Caravaca es «primordial», según García Díaz, para el municipio. «Nos situaría geográficamente en el mapa. Lorca ganaría a nivel logístico como entrada a Andalucía, la Meseta y el Levante. Todo pasaría por el nudo de Lorca y los polígonos industriales multiplicarían su actividad por tres», explicó.
La autovía A-7 se beneficiaría, añadió el presidente de Ceclor, ya que «se aliviarían sus problemas de tráfico, muy complicado en el tramo de Puerto Lumbreras a Murcia. No tiene sentido venir de Madrid y hacer un ele para entrar en Murcia, cuando hay una línea recta a través de Caravaca».
