La Audiencia Provincial de Murcia ha desestimado el recurso presentado por un hombre contra la orden de alejamiento dictada por un juzgado de instrucción de Cieza después de que su expareja denunciara malos tratos y que la obligaba a pedirle perdón de rodillas si no hacía las cosas como él quería.
El auto de la Audiencia, al que ha tenido acceso Efe, señala que la orden de alejamiento y la prohibición de comunicarse con la denunciante son medidas cautelares que están justificadas, dada la personalidad machista del denunciado, que cuenta con cuatro condenas en su haber por delitos de violencia de género.
En su recurso, este hombre negó que existiera una situación objetiva de riesgo para la que había sido su pareja, además de defender la presunción de inocencia.
Al rechazar la apelación, el tribunal de la Audiencia Provincial comenta que existen indicios bastantes contra él y que las medidas adoptadas eran necesarias, y recuerda que, según la denunciante, a lo largo de los dos meses que duró la convivencia fue agredida en varias ocasiones, la última, a mediados de diciembre de 2019.
Esa vez, aseguró, llegó a perder momentáneamente el conocimiento al presionarle sobre el cuello con fuerza, y dice la sala que consta un certificado médico en el que se refleja que los facultativos observaron la presencia de lesiones en varias partes de su cuerpo.
Según la denunciante, durante los dos meses que estuvieron juntos no le permitió hablar con sus amistades, y, mucho menos, con hombres, ya que esto último lo consideraba una falta de respeto hacia el mismo.
También expuso la mujer en su denuncia que la obligaba a lavar su ropa a mano porque decía que la lavadora tenía microbios.
