«La situación sigue siendo crítica en Molina de Segura», así de contundente se expresaba ayer el alcalde en funciones de Molina de Segura, José de Haro González, al presentar los datos actualizados de la pandemia en el municipio, en el que el número de casos activos era este miércoles de 528. Hace una semana, Molina tenía 617 casos activos, lo que supone un descenso del 14,4%.

Así, la incidencia acumulada en los últimos 7 días en Molina ha pasado de 744,2 del día 21 de enero, a situarse en 514,7 casos por 100.000 habitantes este miércoles, lo que significa casi 230 casos menos. Aunque esta última semana la localidad ha registrado ocho fallecimientos.

Por zonas básicas de salud, la incidencia acumulada más alta se localiza en la zona Sur, con 685,8 casos por 100.000 habitantes en los últimos 7 días.

Aunque los datos son «esperanzadores» para el regidor de la localidad, ya que muestran un aplanamiento de la curva, De Haro remarca que «los niveles siguen estando muy por encima de lo que sería deseable». Por ello, las medidas municipales aplicadas el pasado 13 de enero seguirán estando vigentes durante las dos próximas semanas, hasta el día 10 de febrero.

Así, se mantiene el aplazamiento de la programación del Teatro Villa de Molina, la suspensión de la actividad deportiva en instalaciones municipales para menores de 18 años, el aforo del mercado semanal de los sábados sigue estando al 50% y continuarán cerradas al público las salas de exposiciones, museos, salas de estudio y bibliotecas, excepto para el servicio de préstamo y devolución. Además, desde el Ayuntamiento «seguimos pidiendo a la ciudadanía molinense que continúe manteniendo el autoconfinamiento voluntario», concluyó el alcalde en funciones.