Debido a la pandemia que nos corroe, ya han visto lo que aparece en la tercera página, sobre las Fiestas de Ricote. Que se reducen a las novenas y al Fervorín, con sordina, amén del pregón especial, a cargo de José Miguel Moreno Moreno, el zagal de Ambrosio, (servido en bandeja por La Opinión) y pare usted de contar.

Pero hubo épocas gloriosas, en las que aparte de ser las primeras del año, en el calendario festivo de la Comunidad, su júbilo era desbordante. Y si no lean, y lean con fervor, y su puntito de nostalgia, lo que se decía de las mismas, en el libro editado por La Opinión, en el año 2008, titulado 'Folclore y Fiestas de la Región', con textos de Curro Gomez-Vizcaíno, en la página 14:

«Dos de los días de estas celebraciones son declarados festivos en todo el municipio. Los actos principales se celebran el día 20 y el domingo cercano al 20. Suelen comenzar las fiestas el día 11 (9 días antes de la festividad) al mediodía con un volteo de campanas acompañado de lanzamiento de cohetes y tracas que anuncian las novenas en honor al patrón. El día 19, víspera de la festividad grande, comienza a las 6.00 horas con una alborada seguida de una degustación de churros con chocolate. A las 12.00 horas es el tradicional lanzamiento de globos en la plaza de España. Por la tarde de ese día hay carreras de cintas a las 17.00 horas ; y a las 19.30 con la misa del último novenario, se hace una ofrenda floral. El día 20 comienza a las 9.00 horas, con un recorrido musical por las calles del pueblo anunciando el día grande. Hay concierto musical en al plaza a la hora del aperitivo y por la tarde juegos tradicionales. A las 19.00 horas se celebra una procesión con la imagen del santo y reparto de velas, con paradas para lanzar cohetes y tracas. Al finalizar se realiza un acto en la iglesia con himno e incienso. A las 22.30 horasse termina con un castillo de fuegos artificiales. Más tarde continúan las actuaciones. El sábado del fin de semana cercano a la festividad se producen otros actos como el almuerzo motero a las 11.00 horas en el Peñón de La Mazarrón y la gran parrillada a las 13.00 en el recinto situado junto a la plaza de Toros. La corrida de toros y novillos se suele celebrar ese día a las 16.00. El día 22, a las 19.30 horas, es la última procesión del patrón, concluyendo con una gran traca y el tradicional fervorín al patrón que despide las fiestas. El gran desfile de carrozas suele producirse el sábado o domingo cercano a la festividad, desde las 16.00 horas. Existe otra tradición arraigada en estos días y es que los niños que todavía no han hecho la primera comunión adoran al patrón pasando debajo de la banda de San Sebastián También hay que destacar que por las calles se ponen diversos tenderetes entre los cuales hay muchos relacionados con la venta de sartenes de hierro forjado».

Para variar el ritmo cronológico, ahora lo vamos hacer hacia atrás, retrotrayéndonos, al año 1990. En esta ocasión, con un nuevo libro, también editado por Prensa Ibérica, rotulado: 'La Región de Murcia PUEBLO A PUEBLO', mucho más reducido, y de la pluma del veterano periodista, Ismael Galiana, que en su página 668, textualmente dice:

San Sebastián- Fiestas patronales, 20,21 y 22 de enero. Dos procesiones (20 y 22), novenario previo, misa solemne y gran traca el último día. Paúl del Castillo califica la tracada de 'espectáculo único'. Apoyándose en un simple artilugio artesano, el ricoteño «flirtea con los cohetes o cobetes lanzando al viento su particularísima ofrenda». Son miles y miles los cohetes ofrendados al Santo en la procesión final. Hay 'paradas' en lugares estratégicos (Plaza, Rambla, alto de Camarroja, puerta de Pelegrín, plaza de Manducho€) del material pirotécnico que luego se dispara al cielo; 'el frenesí, el delirio, se produce en la Esquina del Reloj, donde al santo (€) se le da la vuelta y de espaldas a la iglesia se inicia por los jóvenes portadores un alegre y jubiloso baile'. Las tracas de la apoteosis y el trueno gordo cierran la fiesta.

Hasta aquí el pequeño juego, la comparanza, entre las fiestas de antaño y las de hogaño. No se les ocurra parangonarlas, para qué. Más que nada porque, peripecias aparte, y de las gordas, las de antes y las de ahora, como 'nuestras', siempre serán las mejores€

¡Felices Fiestas a todos! y ¡Viva San Sebastián!