El PSOE se hará con la alcaldía de Ricote mediante una moción de censura que ya se ha presentado y que entregará el bastón de mando a Rubén Carrasco, número dos de la lista del PSOE en las pasadas elecciones municipales. Será elegido con el apoyo de los cuatro ediles socialistas y con el de la concejala María Victoria Martínez Lajarín, de Somos Región.

Todo surge porque el actual regidor, Rafael Guillamón, del Partido Popular, se encontraba en una situación de «inelegibilidad», según los impulsores de la moción. El motivo es que Guillamón ejercía como Policía Nacional en segunda actividad y, por tanto, su situación era incompatible para ejercer como alcalde. Sin embargo, el PP dice que esta moción se sustenta sobre una mentira porque «no hay ningún impedimento ni problema legal en la elección del alcalde, y así está avalado por informes».

A lo largo del mes de enero se celebrará la moción que dará la alcaldía a Rubén Carrasco Miñano. Los socialistas han consensuado esta decisión con Somos Región porque, según la concejala regionalista, la candidata del PSOE, Ana María Aroca, «tiene una sentencia judicial firme en su contra por amenazas» y dista de tener la «ejemplaridad necesaria».

Por su parte, Aroca avanza que la edil de Somos Región no entrará en el gobierno y que algunas de las principales líneas de su proyecto al frente del municipio serán la aprobación de unos presupuestos municipales para combatir la situación actual y la elaboración de un nuevo plan para personal