El caso de la presunta violación de una joven durante una fiesta presunta violación de una joven durante una fiestacelebrada el pasado puente en una casa rural de Molina de Segura y a la que asistieron unas treinta personas, será investigado por los juzgados de instrucción de esta población murciana.

A través de un auto, el juzgado de instrucción número 9 de Murcia, que recibió el pasado once de diciembre el atestado realizado por la Policía Nacional, decidió ese mismo día inhibirse a favor de los juzgados molinenses, por ser esa localidad donde presuntamente se cometieron los abusos.

Por medio de un auto de aquel día, la autoridad judicial de Murcia acordó la puesta en libertad del único joven detenido como presunto autor de los abusos, al que impuso únicamente la obligación de comparecer cuantas veces fuese llamado, al tiempo que prohibía, tanto a él como a otros dos jóvenes igualmente investigados, el alejamiento de la denunciante.

Esta joven, en su comparecencia en una comisaría de Policía de Murcia al día siguiente de los hechos, aseguró que tras llegar a la fiesta mantuvo relaciones sexuales consentidas con uno de los asistentes, y, después, con otros dos al mismo tiempo, igualmente voluntarias.

Y denunció a un cuarto joven porque, aseguró, no había querido tener un encuentro sexual con el mismo y la habría obligado a ello, al tiempo que se quejó igualmente de que la hubieran grabado cuando practicaba sexo.