Uno de los tres detenidos por la muerte en junio de 2019 de un vecino de Moratalla, cuyo cadáver fue encontrado este fin de semana enterrado en un monte de Yecla, intentó antes incinerarlo en una piscina en desuso ubicada en la finca propiedad de otro de ellos.

Así se recoge en las diligencias del caso en las que se indican también que el móvil del crimen fue, presuntamente, apoderarse de los 34.000 euros con los que la víctima, J.A.M., más conocido por 'El Rosao', había acudido a la vivienda de uno de ellos para una supuesta operación de narcotráfico.

Uno de los detenidos por funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía (CNP), que fue arrestado en Pinoso (Alicante), J.M.G., declaró a los agentes que llevó a otro de ellos a la casa de un tercer presunto implicado porque quería comprarle cincuenta o cien gramos de marihuana.

Y añadió que en un momento determinado se quedaron solos en la casa el vecino de Moratalla asesinado y otro de los detenidos, que responde a las iniciales I.P.. Agregó que al regresar a la vivienda se encontró el cuerpo sin vida del moratallero en el suelo, mientras que I.P. se llevaba las manos a la cabeza por lo que había sucedido.

Fue entonces cuando, siempre según su declaración, I.P. le pidió que le ayudara a trasladar el cadáver hasta su coche, lo que así hizo, depositándolo en los asientos traseros, dirigiéndose a una finca alquilada del declarante para coger unos plásticos con los que taparlo.

J.M.G. declaró así mismo a la Policía que al salir de la casa con un plástico observó que había llamas en la piscina y que, presuntamente, su acompañante había prendido fuego al cadáver, por lo que procedió a echar agua para apagarlo.

Tras volver al interior de la casa y coger unas mantas, envolvieron de nuevo el cadáver, lo colocaron otra vez en el vehículo y lo trasladaron hasta un paraje cercano, donde lo enterraron de forma superficial y donde fue encontrado el pasado fin de semana.

Este detenido reveló también que unos dos meses después de los hechos se encontró en una fiesta en Jumilla (Murcia) con I.P., quien le habría amenazado con quitar la vida a su hermana pequeña "si se le ocurría abrir la boca".

En cuanto a los 34.000 euros que se cree constituyó el móvil del crimen, manifestó que 'El Rosao' había acudido a Yecla con una bolsa con dinero, pero que desconocía su cuantía y el destino que se le dio a la misma.

Respecto a la forma en que se produjo la muerte, I.P. aseguró que 'El Rosao' murió asfixiado a manos de uno de los detenidos, que habría presionado su cuello con el antebrazo.

Este detenido confirmó que el fallecido acudió con una bolsa que contenía 34.000 euros, cantidad de la que él mismo recibió mil euros, mientras que los 33.000 restantes se los habrían repartido otros dos presuntos implicados. EFE