El Juzgado de Instrucción Nº 1 de Cieza, en funciones de guardia, decretaba ayer la libertad con cargos de un individuo que fue detenido en Abanilla acusado de violar a una vecina con una enfermedad mental, tal y como explican fuentes judiciales. El sujeto tiene la obligación de comparecer el primer día de cada mes en los juzgados.

Asimismo, el Juzgado ha dictado una orden de alejamiento: el hombre no podrá acercarse a su víctima ni comunicarse con ella por medio alguno.

Los hechos que se investigan habrían tenido lugar en Barinas, una población de poco más de 800 habitantes. Según denunció la propia víctima en el cuartel de la Benemérita, un vecino la habría forzado sexualmente contra su voluntad, hasta llegar a penetrarla. Se da la circunstancia de que esta mujer tiene una enfermedad mental, la cual puede causarle delirios y alucinaciones. No obstante, dada la credibilidad de su relato, los agentes que recogieron su denuncia dieron aviso a la Policía Judicial, departamento que se encarga de esclarecer estos casos.

En concreto, fue la Policía Judicial de Cieza el equipo que se hizo cargo del asunto. Dado que el individuo estaba plenamente identificado, apenas bastaron unas horas para localizarlo y proceder a su arresto, acusado de un delito de agresión sexual.

El vecino, de nacionalidad española y 45 años de edad, durmió en los calabozos del Instituto Armado y en el día de ayer fue puesto a disposición del Juzgado de Guardia de Cieza, el que corresponde por partido judicial a Abanilla, de donde salió por su propio pie. Fuentes cercanas al caso indican que el hombre subraya que él no es un violador.