Los dos hijos de la vecina de Águilas que murió de un disparo en su domicilio a finales de agosto pasado, por el que su esposo está ingresado en prisión como presunto autor del crimen, han declarado como testigos en el juzgado de instrucción de Lorca que investiga los hechos.

La declaración, según han dicho a Efe fuentes del caso, tiene el carácter de prueba preconstituida, con lo que se evitará que tengan que declarar en su día en el juicio, con la victimización que ello supondría para ambos, menores de edad.

La hija declaró a la Guardia Civil al declarar sobre los hechos que encontró el cadáver de su madre al regresar de pasar un día de playa con su hermano.

El detenido y posteriormente ingresado en prisión, A.A., manifestó a los agentes que se le disparó la escopeta que portaba cuando estaba delante de su esposa, sin que su intención fuera la de acabar con su vida.

Y añadió que no sabía cómo funcionaba la escopeta, con la que solo hizo un disparo cuando aquella se encontraba sentada en un sofá y a una distancia de metro y medio.

Los dos menores se encuentran a cargo de un familiar, que realiza las gestiones oportunas para conseguir que se le atribuya la guarda y custodia.