La Federación de Empleados de los Servicios Públicos de UGT (FeSP-UGT) ha denunciado el cierre y despido de las trabajadoras del Centro de Atención Infantil del municipio de La Unión, "decretado por el Ayuntamiento y su alcalde a la cabeza, Pedro López Milán", informaron fuentes de la organización en un comunicado.

Para el sindicado, "es indigno que unos dirigentes allanen el terreno a la nueva concesión de la escuela infantil municipal y así no tengan que subrogar a las empleadas que han venido ejerciendo el servicio".

También ha criticado "que se use dinero público para pagar indemnizaciones a estas trabajadoras, todo ello incumpliendo el texto legal del XII Convenio Colectivo de Centros de Asistencia y Educación Infantil, artículo 31".

Dicho texto, según FESP-UGT, "exige la subrogación del personal en los centros de atención indirecta, como es el caso".

"Con la decisión del equipo de Gobierno municipal se priva a los vecinos de La Unión de servicios esenciales como es la asistencia y la educación infantil mientras no salga a licitación pública el nuevo contrato, y además sonroja el observar la frialdad con la que han abordado esta decisión, que entendemos ilegal".

Para FESP-UGT, "una entidad pública debe dar ejemplo, defender a los trabajadores, cumplir la ley y velar por el empleo de calidad, es decir, todo lo contrario a la práctica de los dirigentes municipales de este municipio".

Por ello, ha exigido que "se reconsidere la decisión y no se cierre dicho centro, así como que las trabajadoras actuales conserven sus puestos de trabajo y, ante una posible entrada de una nueva empresa, se aplique lo dictado en el convenio colectivo y se proceda a la subrogación del total de la plantilla existente".