El alcalde de Totana, Juan José Cánovas, ha confiado este lunes en una próxima flexibilización de las medidas de confinamiento y prevención que afectan a la población desde hace casi dos semanas a la vista de la evolución de los casos de coronavirus.

Cánovas ha hecho estas declaraciones tras reunirse en el Palacio de San Esteban, sede de la presidencia de la Comunidad, con el jefe del Ejecutivo, Fernando López Miras, el consejero de Salud, Manuel Villegas, y el director general de Salud Pública, José Carlos Vicente, con el fin de abordar la evolución epidemiológica de este municipio.

El primer edil ha agradecido al presidente que lo haya recibido "con esta premura de tiempo" después de haber solicitado el encuentro a última hora del pasado viernes, y hacerlo justo antes de la reunión del Comité Regional de Seguimiento del COVID-19 con los expertos del Servicio de Epidemiología.

Los responsables autonómicos y el alcalde han evaluado y analizado la evolución de los brotes que se están registrando en Totana en los últimos días que obligaron al regreso de este municipio a la fase 1; y han abordado de la necesidad de arbitrar ayudas económicas urgentes para los sectores que más están teniendo las consecuencias de esta crisis, la hostelería y el comercio locales.

También se ha tratado la necesidad de que el Ayuntamiento asuma las competencias del cierre de locales de la hostelería por las molestias vecinales y el problema de los horarios.

En cuanto al índice de contagios, ha mostrado su satisfacción por la evolución que está teniendo la pandemia en Totana tras los brotes de las últimas tres semanas; y ha transmitido su esperanza de poder salir a la mayor brevedad de la fase 1.

Además, el consejero de Salud se ha comprometido a estar en comunicación permanente con la alcaldía para poner en marcha ayudas que ayuden a los profesionales de la hostelería y el comercio tras las dos crisis que ha sufrido Totana durante la desescalada y en la actualidad.

De igual forma, se ha abogado por buscar fórmulas de coordinación para hacer un seguimiento efectivo a posibles incumplidores de las cuarentenas por parte de los contagiados y sus contactos, con la colaboración de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad y los profesionales sanitarios.

Por último, ha reconocido la existencia de diferencias de criterio y actitud para intentar afrontar esta crisis y ha reiterado su lealtad al Gobierno regional a las medidas de las autoridades sanitarias.