La Orden de la Inmaculada Concepción cerró en 2015 su convento en Yecla por la falta de vocaciones y ahora las monjas que se unieron a la comunidad de Algezares han firmado un convenio por el que el convento de Yecla pasa al Obispado de Cartagena.

Esta era la voluntad de Antonio Ibáñez Galiano, un sacerdote de Yecla que cedió, a finales del siglo XIX, a las monjas el edificio en usufructo hasta que estas abandonaran el convento, momento en el que, según la voluntad del sacerdote, tendría que pasar a manos del obispo de Cartagena. La firma fue ante notario.