Tabletas, móviles, relojes, cadenas y sortijas, entre otros efectos, han sido recuperados por la Policía Nacional en una operación que se ha saldado con el desmantelamiento de una banda de ladrones que actuaba en casas de la huerta de la Región de Murcia.

En la exposición de efectos, además de los bienes robados, la Policía mostraba las herramientas empleadas por estos amigos de lo ajeno en sus golpes. El Grupo de Delincuencia Especializada se hizo cargo de la investigación, que duró cinco meses y se saldó con la detención de cinco sujetos, con edades comprendidas entre los 19 y los 21 años.

Así lo explicó Marcos Castro, inspector jefe de la Policía Nacional, que indicó que pillaron a estos individuos en una pedanía cercana a Alhama de Murcia.

No obstante, no residían ahí: vivían los sospechosos en la localidad murciana de Torreagüera. En el registro domiciliario autorizado por el juez, la Policía Nacional encontró los objetos presumiblemente robados.

Objetos que serán expuestos ahora en las dependencias de la Policía en Sangonera, para que vayan las personas que han sufrido un robo y vean si están sus cosas. Seis delitos se han podido esclarecer hasta la fecha. Los investigadores, no obstante, tienen claro que hay más.

En cuanto al arranque de la investigación, todo empezó cuando el Cuerpo tuvo conocimiento de que se estaba produciendo robos en casas de las pedanías murcianas de Churra, Algezares, Aljúcer, La Raya y Santo Ángel.

Se da la circunstancia de que el modus operandi era siempre el mismo: los amigos de lo ajen localizaban posibles objetivos y se repartían las tareas para perpetrar el delito. Así, unos eran los autores materiales de los robos en las viviendas, a las que entraban forzando puertas y ventanas, y otros vigilaban para que no viiese nadie que les pudiera pillar.

Pararon por el confinamiento

El confinamiento desplomó el delito en la Región, y los integrantes de esta banda también hicieron un parón en su ‘actividad’. Con la declaración del estado de alarma, estos sujetos «rebajaron su actividad ilícita», apunta la Policía Nacional, que apostilla que «si bien, lejos de cesar en la comisión de hechos delictivos, continuaron robando, y con el comienzo del desconfinamiento ampliaron sus zonas de actuación, desplazándose entre diversas localidades, como Molina de Segura y Las Torres de Cotillas».

Los sospechosos ya han sido puestos a disposición del Juzgado de Guardia, que ha ordenado su ingreso en prisión provisional.