Agentes de la Policía Local de Bullas intervienen en un supuesto delito de quebrantamiento de medida cautelar y lesiones en el ámbito de la violencia de género.

El hombre agredió supuestamente a su expareja y después ingirió gran cantidad de fármacos. La chica, que manifestaba que había sido agredida, no podía salir de la vivienda porque su expareja había tirado las llaves por el retrete

Agentes de la Policía Local de Bullas han instruido diligencias por los supuestos delitos de quebrantamiento de medida cautelar y lesiones en el ámbito de violencia de género.

Los hechos sucedían el pasado 17 de mayo cuando, tras recibir llamada del servicio de coordinación operativa CECOP 112, se comunicaba que una chica afirmaba encontrarse con su expareja en el interior de una vivienda necesitando ayuda urgente ya que este había ingerido gran cantidad de comprimidos del fármaco ‘tankimazin’ y se encontraba tirado en el suelo, temiendo por su integridad física.

Una vez que los agentes se desplazaron al lugar junto con personal sanitario del Centro de Salud de Bullas, la chica, que se encontraba en una de las ventanas, manifestaba que había sido agredida, mostrando uno de los dedos de la mano con apariencia de estar facturado, entre otras lesiones, y explicaba que no podía salir de la vivienda al haber tirado su presunto agresor la llave por el retrete.

El supuesto autor de los hechos fue trasladado al Hospital Comarcal del Noroeste para el tratamiento por la ingesta de fármacos y por el intento de autolesión. La víctima fue trasladada a dependencias policiales y posteriormente al Centro de Salud para realizarle un reconocimiento médico.

El hombre quedaba posteriormente detenido por la Guardia Civil por los supuestos delitos de lesiones en el ámbito de la violencia de género y quebrantamiento de medida cautelar, ya que se encontraba en vigor una orden de alejamiento y comunicación respecto a la víctima.