El cuartel que la Policía Local de Molina de Segura tiene en La Alcayna permanece cerrado desde el día 1 tras un posible caso positivo de coronavirus en un agente, informan fuentes cercanas al caso.

Se da circunstancia de que este agente había pedido el día antes tener un trabajo de oficina, precisamente por el riesgo de conllevaba estar en la calle patrullando, ya que él es mayor de 55 años.

Una ambulancia de movilizaba ayer, Día del Trabajo, a las dependencias del cuartel donde se encontraba este agente, que se sintió indispuesto, sufrió fuertes dolores y llegó a caer al suelo medio inconsciente, como consecuencia del dolor. El hombre fue trasladado a un hospital y, afortunadamente, ya dado de alta.

Así, once policías permanecen en cuarentena, a la espera de saber si están o no contagiados.

Molina de Segura cuenta con 110 policías, de los cuales, antes de esta coyuntura, ya había algunos de baja. A ellos se unen los once que han de permanecer en sus hogares por haber tenido contacto directo con el agente enfermo, que también se encuentra ya en su domicilio. De este modo, la plantilla queda mermada.

Los agentes que están en cuarentena no saben cuándo les podrán hacer la prueba que confirme si tienen o no el virus. En el caso de estar contagiados, temen haber podido pegárselo, a su vez, a sus allegados, por lo que, de momento, permanecen aislados.

El enfermo ya estuvo en cuarentena hace unas semanas, puesto que intervino en un servicio de acompañamiento a una persona en ambulancia, persona que dio positivo en coronavirus. Entonces, el policía fue sometido igualmente al test, que dio negativo.

Igual pasó en Cartagena

La semana pasada, agentes de la Policía Local de Cartagena eran puestos en cuarentena, al presentar uno de ellos un cuadro febril. Finalmente, las pruebas descartaron que esta persona tuviese coronavirus y los agentes pudieron incorporarse a sus respectivos puestos con normalidad.