Se volvió y cumplir con la tradición y los tambores han sonado en Moratalla tanto el Jueves como el Viernes Santo. Las procesiones y actividades vinculadas con la Semana Santa fueron suspendidas, con el fin de que no se propagará la pandemia del Covid-19. Desde la Asociación de Tamboristas de Moratalla se ponía de manifiesto que este «sería un año muy difícil para todos los moratalleros, pero que el momento hacía que la gente se quedará en sus casas». Esta situación excepcional no ha impedido que, desde los balcones de cada casa de Moratalla, resuene un tambor en esta Semana de Pasión.

La Asociación pidió colaboración a todos los tamboristas, para hacer que tanto Jueves, como Viernes Santo y Domingo de Resurrección suenen los tambores de 12 a 13 horas.

También se mandaba un mensaje de solidaridad, «sonarán más fuerte que nunca, por todas aquellas personas que nos cuidan y velan por nuestra salud, por todas aquellos que nos posibilitan la alimentación, por aquellos que velan por nuestra seguridad, por todos los que están aportando su granito de arena para salir de esto», Asimismo se animaba también a la participación de los más pequeños que en palabras de la Asociación, «están dando un ejemplo de fuerza y valentía».

Desde el consistorio, el alcalde de Moratalla, Jesús Amo, también ha emitido un bando donde se pedía a todos los tamboristas que participaran en este simbólico encuentro, desde los balcones, y que todos fueron ataviados por las túnicas que son propias de la Semana Santa moratallera.