La Policía Nacional ha detenido en Lorca (Murcia) a tres individuos de nacionalidad extranjera que empleaban presuntamente a compatriotas suyos en situación irregular, sin contrato de trabajo ni alta en la Seguridad Social, obligándolos a trabajar todos los días de la semana por salarios ínfimos, según informaron fuentes del citado Cuerpo en un comunicado.

Las tres personas, de nacionalidad búlgara, ecuatoriana y marroquí, fueron detenidos por un delito contra el derecho de los trabajadores en el marco de una operación para luchar contra la explotación de los ciudadanos extranjeros en Lorca. Se trata de una operación policial que se ha llevado a cabo con la colaboración de la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social de Murcia.

La operación comenzó a raíz de diferentes informaciones recibidas por la Policía Nacional en las que se denunciaba la posible explotación de trabajadores extranjeros. Al parecer, el personal de varios locales comerciales de Lorca prestaba sus servicios sin permiso de residencia ni de trabajo.

Los responsables de estos establecimientos comerciales podrían estar empleando a compatriotas suyos en situación irregular, sin contrato de trabajo ni alta en la Seguridad Social, para obligarles a trabajar todos los días de la semana por salarios ínfimos, según las mismas fuentes.

CINCO INSPECCIONES

Cuando la Policía Nacional concretó los establecimientos que podrían estar dedicándose a la explotación laboral de ciudadanos extranjeros, los agentes establecieron, junto a Inspección de Trabajo, un dispositivo policial los pasados días 20 y 21 de febrero que consistió en la entrada y registro de cinco establecimientos con el objeto de llevar a cabo controles laborales y de extranjería.

En el dispositivo policial participaron agentes de las Brigadas de Policía Judicial, Extranjería y Fronteras y Seguridad Ciudadana de la Comisaría de la Policía Nacional en Lorca. Además, se solicitó la colaboración de agentes destinados en la Unidad de Guías de Caninos de la Jefatura Superior de Murcia.

Finalmente, el dispositivo culminó con la detención de un total de veintitrés personas, tres de ellas investigadas por delitos contra el derecho de los trabajadores y de los ciudadanos extranjeros, las otras veinte, al encontrarse en España sin ningún tipo de autorización de estancia ni residencia, fueron trasladadas a dependencias de la Policía Nacional por una infracción a la vigente Ley de Extranjería.