El entorno de la puerta principal del cementerio de San Clemente, en la Ciudad del Sol, es uno de los espacios candidatos a acoger de forma definitiva la escultura del Ángel de la Fama, una creación hecha en piedra, de cinco metros de altura y 7.500 kilos de peso, que lleva dando bandazos de un sitio para otro desde hace casi cuatro décadas.

Allá por abril de 1980 fue cuando tuvo que ser retirada desde lo más alto de la Colegiata de San Patricio, después de que una grúa que se encontraba restaurando la cubierta y tejados del principal templo de la ciudad le produjese daños, por accidente. Parte del angelote cayó entonces al atrio de la Colegiata, desde lo más alto del templo.

La figura, considerada como una pieza de interés cultural de gran importancia, se recompuso siete años después de aquel accidente. La estatua, que representa a un niño que toca una trompeta, fue realizada por el cantero Agustín de Pareja y se puso allá por 1702 en La Colegiata. Hasta que tuvo lugar el percance.

En su reconstrucción se utilizó una mezcla de cal, con arena, polvo de mármol y cemento. El pintor Manuel Muñoz Barberán se ofreció para recuperar la pieza.

En la Plaza del Cardenal Belluga, junto a San Patricio, permaneció la figura hasta que el 6 de octubre de 2010 fue trasladada hasta un espacio del polígono industrial de Saprelorca, en La Torrecilla.

Dicen los expertos que, de haber permanecido en su lugar original (en la parte más alta de la Colegiata) el 11 de mayo de 2011, con motivo de los terremotos, seguramente se habría desplomado sobre el atrio del templo.

En el año 2014 hubo un nuevo cambio y la figura fue trasladada hasta el Camino del Cementerio en la pedanía de La Torrecilla, concretamente, hasta la empresa Piedra Viva de Hermanas Molina S.L.U., donde permanece en la actualidad. Se trata de una empresa especializada en la talla y restauración de piedra natural, que ha presentado un presupuesto para su recuperación.

Según María Molina, una de las responsables de la sociedad, la pieza presenta algunas fisuras que hay que coser además de la limpieza y restauración que necesita. Explica Molina que se trata de una pieza elaborada a base de piedra franca, como popularmente se conoce en Lorca.

El grupo municipal de IU-Verdes presentará al Pleno que se celebra mañana una pregunta a través de la cual se solicita que el equipo de gobierno diga dónde piensa reubicar la figura. La concejala de Cultura, María Ángeles Mazuecos, dijo a este diario que hay que con la opinión también de la Dirección General de Cultura del Gobierno autonómico.