Quizá el ibuprofeno que tomamos en casa cuando sentimos un dolor muscular, de cabeza o de muelas puede tener sello murciano, ya que en el municipio de Alcantarilla está una de las principales plantas del Grupo Olon, encargados de elaborar los principios activos de decenas de medicamentos que posteriormente los grandes laboratorios envasan en blister y distribuyen por todo el mundo.

Olon es el propietario de Derivados Químicos, una empresa nacida en 1987 para fabricar intermedios utilizados en veterinaria y que unos años después comenzó a hacer principios activos para el mercado farmacéutico.

Esta empresa de Alcantarilla, que durante años ha estado en el punto de mira por los altos niveles de tolueno que aparecían en las mediciones realizadas en la zona, ha hecho un ejercicio de transparencia y ha decidido abrir sus puertas para dar a conocer cómo trabajan y en qué consiste su día a día, así como las mejoras que están introduciendo desde que en 2016 fue adquirida por la italiana Olon. En esta visita ha estado LA OPINIÓN y junto a sus responsables y directivos del Colegio de Farmacéuticos de la Región hemos podido ver unas instalaciones que están dotadas con la última tecnología y cuya misión es «innovar para mejorar la salud de las personas», tal y como explica el presidente de Derivados Químicos, Marcello Buson.

Nada más cruzar la puerta de la planta de Alcantarilla llama la atención el fuerte olor químico que hay en ella y las estrictas medidas de seguridad que hay que seguir: gorro, casco, gafas, bata y calzas para evitar la transmisión de microorganismos y patógenos, y nada de móviles ni cámaras para no dar pistas a la competencia debido al secreto industrial.

Olon cuenta con 57 familias de patentes y sólo en las instalaciones de la Región de Murcia trabajan con treinta principios activos de los que llegan a fabricar cada año 500 toneladas de 'polvo', que posteriormente envían en cubas a cada uno de los destinatarios. Entre estos productos hay antibióticos, antivirales, antihipertensivos, antineoplásicos, antidiabéticos y antidepresivos, así como medicamentos cardiovasculares.

El departamento de I+D es uno de los pilares de la empresa, tal y como explica René Rodríguez, director Científico de Derivados Químicos, quien muestra desde el otro lado del cristal el trabajo que hacen los investigadores en los laboratorios y donde se llevan a cabo las evaporaciones y mezclas. De ahí pasan a los reactores (con capacidad para 2, 3 o 5 litros), que permiten observar el comportamiento y las reacciones antes de ir al siguiente nivel, la planta.

La empresa funciona con horario americano y tres turnos desde las 6.00 del lunes a las 14.00 horas del sábado, aunque a lo largo del año programa dos paradas técnicas, en agosto y diciembre, para llevar a cabo limpiezas, ajustes y reparaciones.

En las plantas se encuentran los grandes reactores, inoxidables o esmaltados, y en los que se llevan a cabo las mezclas de disolventes desde un panel de control. Llama la atención que dentro no hay personal trabajando y únicamente un responsable maneja el proceso desde un panel, desde el que se controla hasta el más mínimo detalle, incluida la extracción de gases. La capacidad de estos reactores va desde los 50 litros hasta los 8.000.

El producto resultante pasa a la sala limpia o sala blanca, donde una gran centrifugadora se encarga de separar el producto del agua y hace que éste quede adherido a una tela de la que es separado de forma automática con una espátula. Ese 'polvo' de la pipamperona (antisicótico que estaban fabricando en el momento de la visita) cae a las cubas y, tras someterse al control de calidad, es enviado a los laboratorios para su transformación final.

Mejora ambiental

Para reducir las emisiones de gases, en 2016 Derivados Químicos incorporó un quemador (oxidador térmico regenerativo) que le ha permitido bajarlas en un 30 por ciento los niveles permitidos, reduciendo así el impacto sobre el medio ambiente. Como medida de precaución, el sistema cuenta con un dispositivo que es capaz de detener el proceso de producción antes de que se superen los valores límites. Además, tienen previsto iniciar el próximo verano las obras para remodelar la balsa de residuos, con las que también se hará una mejor gestión.

Visita institucional a las instalaciones

Derivados Químicos de Alcantarilla ha abierto sus puertas esta semana a una visita institucional y de medios de comunicación a la que ha asistido parte de la directiva del Colegio de Farmacéuticos, el director general de Salud Pública de la Consejería de Salud, José Carlos Vicente, y el alcalde de Alcantarilla, Joaquín Buendía.