El Gobierno regional presentó ayer en la comarca del Guadalentín su plan de ayudas económicas a empresas para financiar actuaciones de mejora de la eficiencia energética, que cuenta con fondos de casi 22 millones de euros en subvenciones. La consejera de Empresa e Industria, Ana Martínez Vidal, dijo en la sede de la patronal Ceclor que este plan contempla subvenciones destinadas a mejorar la tecnología en equipos y procesos industriales y a implantar sistemas de gestión energética.
El objetivo de esta iniciativa es ayudar a las empresas del sector industrial a reducir su consumo de energía, rebajar las emisiones de dióxido de carbono y mejorar la eficiencia energética, resaltó Martínez Vidal, que recordó que las ayudas cuentan con la financiación del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder). El importe total de las ayudas a fondo perdido asciende a 21,8 millones, las pequeñas empresas podrán pedir hasta el 50 por ciento de la inversión realizada en la instalación de tecnologías para el ahorro energético, las medianas empresas hasta el 40 por ciento y las grandes empresas hasta el 30 por ciento de lo invertido en estas tecnologías.
En el caso de las pymes, el requisito para acceder a la bonificación es hacer una inversión mínima de 50.000 euros para mejorar los equipos y procesos o de 20.000 euros si se trata de implantar sistemas de control de energía; mientras que para las grandes empresas se establece un umbral de 150.000 euros de inversión para mejorar la tecnología en equipos y procesos industriales y de 30.000 euros para implantar sistemas de gestión energética.
El plazo de estas ayudas del Info comenzó en diciembre de 2019 y permanecerá abierto hasta el 31 de diciembre de este año. Toda la información se puede consultar en la sede electrónica del Info.
Las solicitudes hay que realizarlas a través del área de tramitación electrónica del Info, para ello los interesados deberán rellenar el formulario específico que se encuentra en la web de este organismo y adjuntar los requisitos y la documentación correspondiente a la Clasificación Nacional de Actividades Económicas (CNAE) de las empresas que pueden optar a las ayudas.
Desde la fecha en que reciben la notificación de concesión de la ayuda, las empresas tienen un máximo de 18 meses para implantar en sus instalaciones las actuaciones de ahorro y eficiencia energética para las que la han recibido, ya sea en la mejora de la tecnología en equipos y procesos industriales o en la implantación de sistemas de gestión energética.
