El Defensor del Pueblo ha requerido al Ayuntamiento de Cieza y a la Consejería de Agua, Agricultura, Ganadería, Pesca y Medio Ambiente de la Región de Murcia que informen sobre la aplicación de la resolución conjunta que prohíbe la quema de balas de paja contra las heladas, y en la que se establecen también duras restricciones sobre el uso de otros combustibles, con el objetivo de proteger la salud de la población.

Esta actuación por parte del Defensor del Pueblo responde a la nueva documentación remitida por Ecologistas en Acción, y en la que se denuncia la permisividad de estas administraciones ante las quemas anti-heladas a pesar de su prohibición, y de las recomendaciones de las autoridades sanitaras regionales para que se impidan este tipo de prácticas, por el elevado riesgo que supone para la salud de la población.

La organización ecologista explica que, tras la aprobación de la Resolución conjunta por parte de varias direcciones generales mediante la que se prohíben estas prácticas, ni Ayuntamiento ni Comunidad Autónoma, parecen adoptar medida alguna de control o inspección para evitar que se sigan produciendo unas quemas que generan kilométricas nubes tóxicas, y que disparan los niveles de contaminación atmosférica a valores extremadamente altos durante horas.

El resultado es que este tipo de quemas (balas de paja prensada, botes de parafina o estufas de fuel) se han seguido realizando en algunas explotaciones agrícolas de la Vega Alta con total normalidad durante el año 2019, provocando graves episodios de contaminación.

De hecho, explican, «el pasado 28 de marzo de 2019, apenas una semana después de la publicación en el Borm de que estas prácticas quedaban prohibidas, se registró en Cieza uno de los episodios más grave de los últimos años». Por lo que desde la organización ecologista, apuntan finalmente, temen que este año vuelvan a registrarse en breve (meses de febrero y marzo) quema masivas contra las heladas a pesar de la prohibición vigente.