El Ayuntamiento de Lorca ha criticado la “xenofobia y racismo extremo” del artículo 'Los lorquinos, en peligro de extinción' publicado este miércoles por Falange Murcia en su blog en el que alude a la población inmigrante de la ciudad, donde casi el 23 por ciento de la población es extranjera y perteneciente a 86 nacionalidades.

En su artículo, Falange Murcia se refiere a los datos oficiales sobre la población que esta semana ha hecho públicos el consistorio, según el cual la población extranjera de la localidad duplica la media del conjunto del país, que es del 10,7 por ciento.

La organización de ultraderecha señala que esas cifras “no incluyen a los inmigrantes a los que se les ha regalado la nacionalidad española, ni a inmigrantes ilegales, que no computan, lo cual hace que la proporción de españoles en Lorca sean aún menor”.

Falange dice temer además “que no en muchos años los lorquinos se habrán extinguido y serán sustituidos por inmigrantes musulmanes del norte de África” y considera “nulo” el grado de integración de estos extranjeros, a los que atribuye la “degradación de los barrios en los que se concentran”.

También sostiene que el número de delitos en Lorca “no deja de crecer en paralelo al de su población extranjera” y señala que los robos con violencia se han multiplicado en la ciudad en los últimos años.

Ante la publicación de Falange Murcia, la concejala de Diversidad de Lorca, Antonia Pérez, del PSOE ha señalado que el artículo, distribuido también por las redes sociales, le produce “indignación”.

Ha criticado la lectura “completamente subjetiva” de los datos estadísticos municipales sobre la población extranjera que ha hecho la organización y que “solo demuestra su falta de cultura, su xenofobia y racismo extremo”.

Pérez ha defendido que los inmigrantes son “pilar fundamental en la economía lorquina, en un importante sector primario que permite la creación de miles de puestos de trabajo”·.

La edil socialista ha invitado a los autores del artículo a visitar Lorca “donde la multiculturalidad ha sido pasado y presente” y ha defendido que la diversidad supone “una riqueza cultural y patrimonial” de la que “hace gala” la ciudad.