La Asociación Cultural San Juan de la Cruz y Santa Teresa de Jesús en Caravaca ha presentado ante la Dirección General de Patrimonio Cultural de la Región de Murcia y el Ayuntamiento de Caravaca de la Cruz un informe sobre la preocupante situación observada en el Monasterio, en el que se detallan sus numerosos deterioros.
El informe se acompaña de una solicitud para que desde las administraciones, como responsables subsidiarias de su salvaguarda, se recuerde a los propietarios sus inexcusables deberes legales y se adopten cuantas medidas urgentes resulten necesarias para detener la degradación del monumento, asegurar su conservación y devolverle el grado de decoro que merece. Todo ello al amparo de lo previsto en la Ley 16/1985 de Patrimonio Histórico Español y la Ley 4/2007 de Patrimonio Cultural de la Región de Murcia.
El interés cultural de este monumento excede, según el informe, del ámbito local y regional. Se trata del primer establecimiento de monjas Carmelitas Descalzas en el antiguo Reino de Murcia (1576) y la duodécima fundación femenina directamente promovida por Santa Teresa de Jesús. Fue uno de los primeros cenobios de monjas de nueva planta y uno de los pioneros en respetar las directrices constructivas marcadas directamente por la Santa Fundadora en la ciudad de Malagón. Además, como es sabido, sólo Caravaca y Segovia poseen a la vez una fundación Teresiana y otra Sanjuanista.
El estado de las cubiertas del edificio, junto al lamentable deterioro de la fachada principal y la presencia de termitas y xilófagos en el convento, hacen temer por la integridad del inmueble que ha sufrido una espiral de expolios y degradación desde el año 2004. Teniendo en cuenta que el Monasterio de San José, de Madres Carmelitas Descalzas, fue declarado Bien de Interés Cultural, con categoría de Monumento, por Decreto nº177/2003 de 5 de diciembre del Consejo de Gobierno de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia (BORM nº 190 de 17/12/2003), el declive se inicia poco tiempo después de su declaración como Bien de Interés Cultural (BIC). "Un hecho muy preocupante que deja en evidencia los mecanismos de protección previstos en las leyes de defensa del patrimonio histórico español", apuntan desde la asociación.
Las causas de esta degradación radican en un déficit de mantenimiento ordinario, que es más evidente en los elementos de madera del edificio, al que se suman otros daños ocasionados por un cierto abandono del inmueble, como ventanas que permanecen abiertas durante días, cristales rotos, defectos de cierre de las carpinterías deformadas o dilatadas por la humedad, ataques incontrolados de xilófagos y numerosos excrementos de animales en los corredores de las celdas, entre otras deficiencias recogidas en el informe.
En la asociación preocupa especialmente el estado de las cubiertas primitivas de la iglesia y del pabellón más antiguo, conocido como el «Tránsito de las Regidoras» porque alberga las celdas de las madres fundadoras. Dos de los lucernarios abuhardillados del tejado se encuentran próximos al colapso y las goteras han causado también daños en las pinturas del templo, que han sufrido desprendimientos.
Conclusiones
Entre las conclusiones del informe se cita la necesidad de asegurar "con urgencia" la erradicación de un peligroso foco de termitas que se ha detectado en el primer nivel del monasterio y "confirmar que no se haya propagado de forma silente por sus valiosas estructuras, retablos y esculturas leñosas. Y erradicar los agresivos ataques de xilófagos (carcoma) localizados en las barandillas de las escaleras y en las carpinterías más antiguas del cenobio, de innegable valor patrimonial".
Los daños en las dos portadas de piedra podrían llegar a ser irreversibles si no se detiene el avance del «mal de la piedra». Algunas piezas del frontón curvilíneo de la portada de la iglesia permanecen sujetas al muro con grapas metálicas desde hace varios años.
La Asociación Cultural «San Juan de la Cruz y Santa Teresa de Jesús en Caravaca», sin ánimo de lucro, tiene entre sus fines fomentar y apoyar cuantas iniciativas resulten necesarias para asegurar la conservación y promoción de las dos fundaciones del Carmelo Teresiano en la población, generando oportunidades para el fortalecimiento de sus valores culturales en el contexto espiritual, histórico y social de la localidad.
