Un hombre, cuya identidad y edad no han sido facilitadas, está siendo investigado por un delito de maltrato animal tras dejar morir a su caballo, al que tenía en condiciones terribles en su parcela, indica la Policía Local de La Unión.

Aunque los agentes lograron rescatar vivo al animal, este finalmente falleció por la gravedad de las heridas. Fue un vecino el que dio la voz de alarma y decidió llamar a la Policía: el equino malvivía "a pleno sol, con altas temperaturas, sin agua y amarrado junto a la carretera", explican desde el Cuerpo.

Tras el aviso, una patrulla se movilizó al lugar y encontraron al caballo en muy mal estado. "Presentaba extrema delgadez, prolapso del pene con zonas edematizadas y abundantes melanomas", apuntan las fuentes. Lo primero que hicieron fue darle agua. Y lo segundo, identificar tanto al dueño como a la persona que, en teoría, se tenía que encargar de cuidarlo.

Obviamente, los agentes sacaron al animal de ahí, para ponerlo a salvo. "Se le buscó un acogida temporal para su curación y recuperación", señalan desde el Cuerpo. Lamentablemente, era tarde y acabó muriendo. Asimismo, la Policía Local instó al Servicio de Protección Animal de la Comunidad Autónoma a que llevase a cabo una inspección. Y abrió diligencias.

Al individuo que dejó morir al caballo se le imputa un delito de maltrato animal y otro de abandono. De momento, está en libertad con cargos. Pero, con el Código Penal en la mano, podría acabar en la cárcel. Actualmente, el Código Penal establece que, quien maltrate a un animal que esté domesticado o amansado, puede ser condenado como máximo a 18 meses de cárcel.