Fueron los sanitarios del Hospital de Molina los que dieron la voz de alarma: había ingresado una mujer que presentaba lesiones compatibles con una paliza. Se avisó entonces a la Policía Local de Molina de Segura, que se hizo cargo del caso.

Así, tras las pertinentes investigaciones, los agentes localizaron y procedieron a la detención del marido de la víctima. En primer lugar, indica la Policía Local de Molina, se creyó que este sujeto tiene antecedentes: estaba siendo buscado por el Juzgado de Lo Penal Nº 25 de Madrid. De esta manera, también para cumplir la orden de busca y captura, se le arresta. Desde la Policía Nacional confirmaron después que este individuo no tenía antecedentes.

La mujer presentaba heridas por numerosos golpes. No obstante, detallan fuentes cercanas, no quiso presentar denuncia contra su marido.

El protocolo marca que los sanitarios han de avisar a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad cuando ingresa una persona que, sospechan por sus lesiones, es víctima de un acto violento, en este caso violencia de género.

No han trascendido ni las edades ni las nacionalidades de víctima y presunto agresor. Del caso se ocupó la Policía Nacional, Cuerpo competente para hacerlo. En concreto, el asunto pasó a la Unidad de Atención a la Familia y Mujer (UFAM) de la Policía Nacional. Fuentes cercanas apuntaron que, en el caso de que la víctima no desee seguir adelante con el proceso judicial, podría archivarse.