Llevaba ocho días muerto en el sofá de su casa de Jumilla. Anoche lo encontraron. Fueron los vecinos los que dieron la voz de alarma, debido al mal olor que emanaba de la vivienda.
Sobre las once menos diez de la noche, cuando agentes de la Policía Local se desplazaron a este domicilio, en la plaza Ingeniero José Mª Abreu de Jumilla, encontraron al único morador de la vivienda ya cadáver. En su salón. Sin signos aparentes de haber sufrido un acto violento.
El hombre tenía 48 años y, según indicaron fuentes cercanas, padecía problemas de azúcar. A falta del resultado del informe del forense, se sospecha que se trató de una muerte natural. El cuerpo de este vecino, soltero y sin hijos, fue trasladado en un furgón al Instituto de Medicina Legal, para practicarle la autopsia. A falta de que trascienda el resultado del informe del forense, se sospecha que se trató de una muerte natural. La causa: hiperglucemia, que es el aumento anormal de la cantidad de glucosa que hay en la sangre.
Después, los restos mortales fueron devueltos a sus familiares, y este miércoles, a las seis de la tarde, tuvo lugar su funeral, en la capilla del tanatorio El Santo Ángel, donde antes fue velado. El hombre, conocido por sus paisanos como ‘Pichote’, tenía dos hermanos y dos cuñadas.
No es la primera vez que una persona es localizada después de pasar tiempo sin vida en su propio hogar, sin que se la hubiese echado en falta durante días, meses e incluso años.
