David S. O. estaba condenado por maltrato y tenía una orden de alejamiento de su ex. Pero no de los vástagos que ambos tenían en común, señalan fuentes cercanas al caso. En los tribunales no se había tratado nada referente a la guarda y custodia de los dos hijos de la expareja, que se separó hace dos años. El Cartagenero seguía viendo de cuando en cuando a los menores. El hombre, se da la circunstancia, había sido condenado por quebrantar la orden de protección impuesta por el Juzgado. Esto pasó hace poco más de un mes. David no podía acercarse a su ex, Laura. Porque lo había condenado un Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Murcia.

El pequeño tenía varias puñaladas, propinadas, presuntamente, a manos de su padre. Cuando la Policía Local entraba en el piso de la avenida Calvo Sotelo de Beniel, encontraba el cuerpo sin vida del pequeño Cristian. Con signos de mucha violencia. Y el de su padre, en otro departamento de la casa. Ahorcado.

La Guardia Civil, cuerpo competente para hacerse cargo del caso, investiga la muerte de este menor de edad presuntamente a manos de su padre en la localidad de Beniel, informan fuentes cercanas al caso.

Los hechos ocurrieron de noche. La alarma saltó porque el hombre no entregó al pequeño a su madre en el horario en el que correspondía. Una patrulla de la Policía Local de desplazó al domicilio de este vecino, de 39 años, situado en la avenida Calvo Sotelo del citado pueblo. Y nadie abría la puerta. Estaba cerrada con llave por dentro.

La Policía, ante el temor de que el pequeño, de 10 años, corriese peligro, avisó a un cerrajero para abrir la puerta. Cuando los agentes entraron, la escena era dantesca. El cuerpo del menor estaba tendido en el suelo, en un charco de sangre. El de su padre, ahorcado en la cocina. Este hombre, David S. O., era conocido como David El Cartagenero.

Familiares del hombre ya habían informado de que este tenía tendencias suicidas. Se da la circunstancia de que el hermano de este hombre se quitó la vida hace años. La madre de ambos está destrozada, indican fuentes próximas.

Las mismas fuentes señalaron que David El Cartagenero había pedido ayuda a los Servicios Sociales en numerosas ocasiones, dado que no tenía trabajo y le habían cortado la luz y el agua. Tampoco pasaba la pensión a su ex, por lo que ella le tenía denunciado. El hombre, aseguran varios vecinos, "iba por el pueblo llorando y enseñando la sentencia". Su situación era "desesperada", afirman, una circunstancia que en absoluto justifica el crimen que, presuntamente, ha cometido.

"No se imagina nadie por lo que estoy pasando, pero aquí estoy y estaré hasta que pueda", escribía hoy mismo la abuela materna del pequeño en su cuenta de Facebook.

"Tenía depresiones y una orden de alejamiento", explicaba hoy Miguel Ángel Morata, primo de la madre del pequeño. El hombre lamentaba la "injusticia que hay en este puto país".