La Fundación Anse ha dado un paso más para la conservación de las poblaciones de murciélagos de la Región. Y es que ha adquirido en propiedad la Zona de Especial Conservación Cueva de Las Yeseras, localizada en Santomera, «con el objetivo de proteger las poblaciones de varias especies de murciélagos con diferente grado de amenaza». Se trata de sendas cavidades que en el pasado se utilizaron para la extracción de yeso, localizadas en el piedemonte de la Sierra de Orihuela, en un área con vegetación arbustiva semiárida que limita con la huerta del Segura y con la cercana población de Santomera.

La Fundación Anse pondrá en marcha estos días una campaña de donaciones para aquellas personas y entidades que deseen colaborar en la adquisición de la Reserva y desarrollar las primeras medidas de protección, habiendo contado ya con una primera aportación de la Fundación Beatrice Ederer-Weber Stiftung.

El proyecto se desarrolla en una superficie de aproximadamente 12.000 metros cuadrados de terreno, la casi totalidad de ZEC ES6200033 Cueva de Las Yeseras, en el municipio de Santomera, un enclave rocoso que ha sobrevivido a las transformaciones agrícolas de regadío de su entorno. Se trata de un importante refugio de murciélagos que llega a albergar más de 3.000 individuos de diferentes especies, entre las que destaca la presencia de Myotis capaccinii (Murciélago ratonero patudo) y Miniopterus schreibersii (Murciélago de cueva) incluidas en el Anexo II de la Directiva 92/43.

Las cavidades también son utilizadas en menor número por otras especies incluidas en los Anexos II y IV de la Directiva Hábitats, como los murciélagos de Herradura Grande y Pequeño (Rhinolophus ferrumequinum y R. hipposideros) y el Murciélago Ratonero Pardo (Myotis emarginatus). Además, sobre el entorno inmediato de las cavidades se ha detectado la presencia de al menos otras cuatro especies de quirópteros: Murciélago de Cabrera (Pipistrellus pygmaeus), el Murciélago Enano (Pipistrellus pipistrellus), el Murciélago Hortelano Pardo (Eptesicus isabellinus) y el Murciélago Rabudo (Tadarida teniotis). Al menos cuatro de las especies que usan la cavidad están incluidas en el Catálogo Español de Especies Amenazadas, una en la categoría 'En peligro de extinción' (M. capaccinii) y 3 en la 'Vulnerable' (R. ferrumequinum, M. schreibersii y M. emarginatus).

El objetivo del proyecto «es la conservación de poblaciones reproductoras de murciélagos, con una veintena de especies presentes en el Sureste de la Península Ibérica, y que constituyen uno de los grupos más diversos entre los mamíferos de la fauna ibérica, y de los que más 'servicios ambientales' presta».