La paralización del nuevo Plan General de Ordenación Urbana de Yecla (PGOU) tras no salir adelante al final de la legislatura ha dejado a los vecinos de la localidad, por el momento, sin planes para construir. Tras su aprobación inicial en el pleno extraordinario del 13 de enero de 2017, el nuevo PGOU contemplaba la creación de más de tres millones de metros cuadrados de suelo residencial urbanizable y otros siete para uso industrial. La zona sur de Yecla iba a ser la más beneficiada dentro del Plan, en la que aquellos vecinos que hayan comprado terrenos para edificar tendrán que esperar hasta después de los comicios de mayo para asegurar su construcción.

Después de dos años desde que se aprobase inicialmente, Yecla vuelve a regirse con el PGOU del año 1984, dejando en el aire algunas de las mejoras de las que podían beneficiarse los vecinos de la localidad, como la eliminación del requisito de tener que poseer una parcela de veinte mil metros cuadrados para construir. Aquellas personas que hayan realizado una inversión en un terreno de menor área podrían encontrarse con la negativa a la hora de solicitar una licencia urbanística. El nuevo PGOU contemplaba, no solo la ampliación de suelo residencial, sino también industrial, en un intento de reforzar la economía yeclana mediante la construcción y la ampliación de la industria, que también ha quedado en el aire.

El Plan General de Ordenación Urbana ha traído un nuevo debate político al Consistorio. La oposición recrimina al equipo de Gobierno que no se haya trabajado lo suficiente para sacarlo adelante, mientras que el Partido Popular defiende que los plazos se están cumpliendo «según los tiempos normales en este tipo de procesos».

El portavoz dele quipo de Gobierno, Juan Miguel Zornoza, ha manifestado el «desconocimiento respecto al PGOU» y ha asegurado que no corre ningún peligro. Según Zornoza, lo que se aprobó en aquel pleno de 2017 no fue el Plan definitivo, sino el inicial, tras el cual se presentaron cerca de 350 alegaciones que han sido respondidas por el equipo redactor del PGOU: «Hace unos meses que los servicios técnicos y jurídicos están trabajando en las respuestas del equipo redactor, y la falta de consenso en algunos puntos está haciendo que el proceso pueda ir algo despacio», ha manifestado el portavoz popular, para quien estudiar «metódicamente cada una de ellas» responde a la posibilidad de que la Comunidad Autónoma, que es quien tiene que aprobarlo en última instancia, pueda rechazarlo si no se hace correctamente.

Por último, defienden desde el equipo de Gobierno que el PGOU no se aprobaría a dos meses de las elecciones locales por un motivo de «higiene democrática».