La Comunidad ha dado otro paso para que se declare al Parque Natural al Parque Regional de Sierra Espuña. Los trabajos técnicos para cumplir con los requisitos que plantea la Ley de Parques Nacionales avanzan y se centran en la ampliación de la superficie del parque, que debe sumar algo más de 2.000 hectáreas a sus 18.000 actuales para alcanzar el mínimo de 20.000 hectáreas que plantea esta norma. Para ello, se está trabajando en la ampliación hacia la zona norte, en las inmediaciones de las áreas catalogadas como Zonas de Especial Protección de Aves, para cumplir también con la necesaria continuidad territorial.

El consejero de Empleo, Universidades, Empresa y Medio Ambiente, Javier Celdrán, explicó ayer que este espacio natural «es sin duda, el mayor pulmón verde de la Región» y recordó que entre sus valores singulares destaca el ser «una de las mayores reservas de pino carrasco de toda España, además de albergar importantes sabinares, encinares y otros sistemas naturales representativos de montaña y alta montaña o de origen kárstico», señaló Javier Celdrán.

La Consejería de Medio Ambiente sacó hace unos meses de un cajón el expediente para solicitar la declaración de Parque Nacional para Sierra Espuña, una iniciativa que puso en marcha en 2005 el entontes consejero del ramo, Francisco Marqués. Es la dirección general de Medio Natural la encargada de analizar las posibilidades, y si se cumplen los requisitos recogidos en la Ley 30/2014, de 3 de diciembre, de Parques Nacionales.

Sierra Espuña es reserva original de pinares de pino carrasco, de los más grandes de España, hecho que se puso sobre la mesa en su día al consejero Marqués por parte de Ecologistas en Acción y que fue determinante para la apertura del expediente. De lograrlo finalmente, este zona protegida regional, de unas 18.000 hectáreas, sería el primer parque nacional de la Región.

Sierra Espuña es una sierra perteneciente a la cordillera Bética situada entre los municipios de Alhama de Murcia, Totana, Aledo y Mula, encontrándose dentro de la cuenca del Segura. Su máxima altitud son los 1.585 metros del Morrón de Totana.

La sierra se encontraba en un estado ecológico lamentable a finales del siglo XIX, con la pérdida de casi toda su cubierta vegetal y presentaba graves procesos de desertificación. En 1889, el ingeniero forestal Ricardo Codorníu acometió la reforestación toda la sierra, en un modelo para su época. En 1931 fue declarada sitio natural de interés nacional, y en 1992 fue protegida como Parque Regional. También está catalogada como zona de especial protección para las aves (ZEPA) y lugar de importancia comunitaria (LIC), dentro de la normativa Europea.

Cuando se anunció la petición de parque nacional, medio millar de vecinos con tierras aledañas a la zona ya protegida se opusieron a dicho expediente, alegando que perjudicaría a sus intereses.